6 de abril de 2025
Hace pocos días llegaron a Chile las secciones principales del Fred Young Submillimeter Telescope (FYST), el nuevo megatelescopio que será instalado a 5.600 metros sobre el nivel del mar, en el cerro Chajnantor de la región de Antofagasta.
Este telescopio, catalogado como un gigante de la radioastronomía, tiene la particularidad que será instalado a un nivel incluso más alto que el Observatorio ALMA. Su misión será estudiar el medio interestelar de la Vía Láctea. Así, el FYST se convertirá en uno de los instrumentos astronómicos más potentes del mundo, por su gran velocidad de mapeo y la alta sensibilidad en su longitud de onda.
En cuanto a plazos, se estima que en abril del otro año entre en operación con su primera observación. Así los confirmó Pedro Correa Krumenacker, gerente de Construcción del proyecto, quien afirmó que “esperamos realizar nuestra primera observación científica (primera luz) en abril de 2026 y las operaciones científicas a tiempo completo esperamos comenzarlas en el mes de julio, del mismo año”.
El megatelescopio comenzará a operar en un año porque, si bien ya llegaron las partes a Chile, el traslado al lugar donde funcionará puede tardar meses.
La llegada del megatelescopio FYST a Chile y la relevancia de este
Salvo los espejos, las piezas del FYST finalizaron su fabricación a fines del año pasado y ahora llegaron a Chile. Se espera que las partes sean transportadas hasta el Cerro Chajnantor en los próximos días, y este proceso se extenderá por nueve meses. Los espejos, en tanto, siguen en su proceso de fabricación en Alemania y llegarían a Chile en julio.
Sobre las funciones del megatelescopio, el gerente de construcción del proyecto señaló que “fue diseñado para realizar observaciones clave en astronomía submilimétrica. Será un observatorio de última generación para el estudio de la radiación del material que se interpone entre nosotros y el fondo cósmico de microondas (CMB), con la capacidad de mapear el cielo diez veces más rápido que máquinas de generaciones previas”.
Según explicaron desde la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile, entre los objetivos está “medir el efecto cinemático Sunyaev-Zel’dovich en cúmulos de galaxias; mapear la emisión de galaxias en la época de reionización y estudiar el medio interestelar en la Vía Láctea y otras galaxias cercanas”. También permitirá el estudio de fenómenos variables en el submilimétrico, contribuyendo y complementando otros proyectos de astronomía de dominio temporal.
Leonardo Bronfman, astrónomo de de la FCFM de la U. de Chile destacó que “la Universidad de Chile aplaude esta iniciativa. La comunidad astronómica nacional se verá beneficiada por la llegada e instalación de este fantástico instrumento”.