Se trata de una plataforma diseñada para reconocer y traducir el habla de personas con condiciones médicas subyacentes, discapacidades o condiciones relacionadas con la edad que dificultan el habla. Sara Smolley es la mente detrás de Voiceitt, una innovadora tecnología de reconocimiento automático de voz (ASR) patentado para personas con discapacidades del habla, voces envejecidas y acentos. La idea está estrechamente relacionada con la historia familiar de Smolley, que desde que nació, se enfrentó con la imposibilidad de hablar con su abuela, diagnosticada con Parkinson a sus 40 años, enfermedad que le quitó la posibilidad de comunicarse. La fundadora y vicepresidente de la empresa explicó que la enfermedad “afectó su capacidad para construir una relación con mis hermanos y conmigo, ya que no podíamos entender lo que decía”. A partir de esto, su “misión se convirtió en ayudar a las personas a comunicarse por voz”. La plataforma Voiceitt está impulsada por inteligencia artificial (IA) y tiene la capacidad para reconocer y traducir el habla de personas con dificultades en el habla.. Danny Weissberg, el cofundador y desarrollador de software que creó Voiceitt junto con Smolley tuvo una experiencia parecida: un familiar muy cercano que perdió repentinamente la capacidad de comunicarse vocalmente después de sufrir un derrame cerebral. Los usuarios pueden acceder a la plataforma desde cualquier dispositivo conectado a Internet, sin necesidad de descargar un programa o aplicación. Funciona tanto como voz a texto como voz a habla sintetizada, permitiendo al usuario hablar en persona en tiempo real, de manera presencial o en una reunión virtual en línea. Smolley también explicó que “en este nuevo mundo de hogares inteligentes activados por voz, automóviles inteligentes, altavoces inteligentes, electrodomésticos inteligentes, podríamos hacer mucho más que simplemente construir un producto, abriendo esencialmente el mundo de estas nuevas tecnologías para personas con discapacidades del habla”.
El fenómeno de la renuncia silenciosa ha sido tema recurrente en el ámbito laboral, pero ahora surge una nueva tendencia: las vacaciones silenciosas. Según el reciente informe Out of Office Culture Report de Harris Poll, cada vez más empleados, especialmente millennials, están desafiando los límites del teletrabajo al tomarse tiempo libre durante sus horas laborales virtuales. El estudio, que encuestó a 1.170 personas activamente empleadas mayores de 18 años, revela que un sorprendente 78% no utiliza todos sus días de permiso. Este comportamiento es aún más pronunciado entre la Generación Z y los millennials. Esta práctica refleja una creciente necesidad de equilibrar la vida personal y profesional en un entorno laboral cada vez más demandante. ¿Estamos presenciando una revolución silenciosa en la forma en que concebimos el trabajo? Los datos sugieren que sí. Ante ello, Libby Rodney, directora de estrategia de The Harris, explica que los profesionales más jóvenes no piden tiempo libre porque se sienten presionados a cumplir con los plazos y ser productivos, poniéndose nerviosos, e incluso preocupados de verse flojos. Así es como casi 4 de cada 10 trabajadores, hasta el rango etario de los millennials, declaran que se han tomado un tiempo libre sin comunicárselo a su jefe, a través del teletrabajo, tomando la situación en sus propias manos. Diferencia entre vacaciones silenciosas y renuncia silenciosa “Descubrieron cómo lograr un equilibrio adecuado entre el trabajo y la vida personal, pero está sucediendo tras bambalinas. No es exactamente renunciar en silencio, sino más bien vacacionar en silencio ”, explicó Rodney.
Se trata de una plataforma diseñada para reconocer y traducir el habla de personas con condiciones médicas subyacentes, discapacidades o condiciones relacionadas con la edad que dificultan el habla. Sara Smolley es la mente detrás de Voiceitt, una innovadora tecnología de reconocimiento automático de voz (ASR) patentado para personas con discapacidades del habla, voces envejecidas y acentos. La idea está estrechamente relacionada con la historia familiar de Smolley, que desde que nació, se enfrentó con la imposibilidad de hablar con su abuela, diagnosticada con Parkinson a sus 40 años, enfermedad que le quitó la posibilidad de comunicarse. La fundadora y vicepresidente de la empresa explicó que la enfermedad “afectó su capacidad para construir una relación con mis hermanos y conmigo, ya que no podíamos entender lo que decía”. A partir de esto, su “misión se convirtió en ayudar a las personas a comunicarse por voz”. La plataforma Voiceitt está impulsada por inteligencia artificial (IA) y tiene la capacidad para reconocer y traducir el habla de personas con dificultades en el habla.. Danny Weissberg, el cofundador y desarrollador de software que creó Voiceitt junto con Smolley tuvo una experiencia parecida: un familiar muy cercano que perdió repentinamente la capacidad de comunicarse vocalmente después de sufrir un derrame cerebral. Los usuarios pueden acceder a la plataforma desde cualquier dispositivo conectado a Internet, sin necesidad de descargar un programa o aplicación. Funciona tanto como voz a texto como voz a habla sintetizada, permitiendo al usuario hablar en persona en tiempo real, de manera presencial o en una reunión virtual en línea. Smolley también explicó que “en este nuevo mundo de hogares inteligentes activados por voz, automóviles inteligentes, altavoces inteligentes, electrodomésticos inteligentes, podríamos hacer mucho más que simplemente construir un producto, abriendo esencialmente el mundo de estas nuevas tecnologías para personas con discapacidades del habla”.
El fenómeno de la renuncia silenciosa ha sido tema recurrente en el ámbito laboral, pero ahora surge una nueva tendencia: las vacaciones silenciosas. Según el reciente informe Out of Office Culture Report de Harris Poll, cada vez más empleados, especialmente millennials, están desafiando los límites del teletrabajo al tomarse tiempo libre durante sus horas laborales virtuales. El estudio, que encuestó a 1.170 personas activamente empleadas mayores de 18 años, revela que un sorprendente 78% no utiliza todos sus días de permiso. Este comportamiento es aún más pronunciado entre la Generación Z y los millennials. Esta práctica refleja una creciente necesidad de equilibrar la vida personal y profesional en un entorno laboral cada vez más demandante. ¿Estamos presenciando una revolución silenciosa en la forma en que concebimos el trabajo? Los datos sugieren que sí. Ante ello, Libby Rodney, directora de estrategia de The Harris, explica que los profesionales más jóvenes no piden tiempo libre porque se sienten presionados a cumplir con los plazos y ser productivos, poniéndose nerviosos, e incluso preocupados de verse flojos. Así es como casi 4 de cada 10 trabajadores, hasta el rango etario de los millennials, declaran que se han tomado un tiempo libre sin comunicárselo a su jefe, a través del teletrabajo, tomando la situación en sus propias manos. Diferencia entre vacaciones silenciosas y renuncia silenciosa “Descubrieron cómo lograr un equilibrio adecuado entre el trabajo y la vida personal, pero está sucediendo tras bambalinas. No es exactamente renunciar en silencio, sino más bien vacacionar en silencio ”, explicó Rodney.