SC-25 se llama el dispositivo que fue desarrollado por el Instituto Inacap y que será parte de un plan piloto de fiscalización que llevará adelante el ministerio de Transporte, para controlar la velocidad de la circulación a la que pueden llegar los scooters eléctricos, cuyo uso se ha masificando en la Región Metropolitana. Desde el Ministerio de Transportes indicaron que el plan piloto se extenderá por cinco meses y también incluirá la medición de asistencia y alimentación con la que cuentan los transportes eléctricos. Según información proporcionada por la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS), “el aparato emula a otro similar utilizado por la Policía Nacional de España en algunas ciudades de ese país para evitar accidentes, los cuales en Chile aumentaron de 491 en 2022 a 563 en 2024″. El ministro de Transportes y Telecomunicacione, Juan Carlos Muñoz, afirmó que se va “a estar en los puntos de mayor concurrencia de este tipo de vehículos. Vamos a estar concentrados inicialmente en Santiago, pero podemos salir también a otras regiones del país”. El ministro Muñoz complementó que al principio habrá “un período de mostrar el dispositivo y de ir educando a las personas que tienen scooters respecto de la falta en la cual están, y luego vamos a pasar a un período de fiscalización con multas y retiros “. Asimismo, Muñoz expresó que cuando los scooters superan el límite de velocidad son inseguros y muy molestos para otros vehículos, cuando es la calle o también cuando van por la vereda o por las ciclovías, detallando que la infracción es sancionada como una falta grave, por lo que se procede a retirar el vehículo y a pasar una multa entre 1 y 1,5 UTM ($70.000 y $100.000). El ministro Muñoz complementó que “si un vehículo está preparado para exceder los 25 km/h, si su motor lo permite, entonces nuestra regulación lo deja de tipificar como un “ciclo” (...), sino que pasa a ser un vehículo motorizado. Y a los vehículos motorizados en Chile se les exige revisión técnica, permiso de circulación y patente. Fuente: Publimetro
La empresa chilena Expedio , dedicada al servicio de scooters eléctricos, anunció el cierre definitivo de sus operaciones en Viña del Mar, tras sufrir el robo y vandalización del 80% de su flota. Con apenas 10 meses de funcionamiento, la compañía comunicó la noticia a través de sus redes sociales, señalando la inseguridad en la ciudad como el principal factor de su decisión. “Queremos agradecer profundamente a todos quienes nos acompañaron durante estos meses. Sin embargo, con mucha tristeza, hemos tomado la difícil decisión de cesar nuestras operaciones en esta ciudad”, indicaron en el comunicado publicado en Instagram. Patricia Solano, dueña de Expedio, explicó que la situación se tornó insostenible. “Nos han robado, nos han vandalizado. Nosotros llegamos a Viña del Mar a prestar un servicio, no a perseguir a los ladrones ni a las personas que nos vandalizan”, comentó en un video difundido por redes sociales. Según relató, desde la primera semana comenzaron a perder scooters, que luego eran encontrados en ferias o zonas rurales como Olmué, muchas veces inutilizados o revendidos. “Era toda una mafia”, lamentó en conversación con El Mercurio de Valparaíso. “Lamentablemente, hemos tenido que recuperar nuestros scooters, porque nos robaron el 80% de nuestra flota”, sostuvo la mujer. La inversión inicial de Expedio alcanzó los 350 mil dólares, una cifra significativa para una empresa chilena de menor tamaño que buscaba posicionarse en el mercado local. “No somos Uber, no somos Woosh. Somos una empresa chilena que invirtió sus ahorros en esto y lo hemos perdido todo”, señaló Solano al citado medio. A pesar de los intentos por frenar los robos, la empresaria afirmó que no obtuvo respuestas concretas tras acudir al Municipio de Viña del Mar, la Policía de Investigaciones (PDI) y Carabineros. “Aquí no hay culpables. La ciudad está insegura y nadie puede asegurarnos que no nos robarán el 20% que nos queda”, concluyó. Fuente: Publimetro
SC-25 se llama el dispositivo que fue desarrollado por el Instituto Inacap y que será parte de un plan piloto de fiscalización que llevará adelante el ministerio de Transporte, para controlar la velocidad de la circulación a la que pueden llegar los scooters eléctricos, cuyo uso se ha masificando en la Región Metropolitana. Desde el Ministerio de Transportes indicaron que el plan piloto se extenderá por cinco meses y también incluirá la medición de asistencia y alimentación con la que cuentan los transportes eléctricos. Según información proporcionada por la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS), “el aparato emula a otro similar utilizado por la Policía Nacional de España en algunas ciudades de ese país para evitar accidentes, los cuales en Chile aumentaron de 491 en 2022 a 563 en 2024″. El ministro de Transportes y Telecomunicacione, Juan Carlos Muñoz, afirmó que se va “a estar en los puntos de mayor concurrencia de este tipo de vehículos. Vamos a estar concentrados inicialmente en Santiago, pero podemos salir también a otras regiones del país”. El ministro Muñoz complementó que al principio habrá “un período de mostrar el dispositivo y de ir educando a las personas que tienen scooters respecto de la falta en la cual están, y luego vamos a pasar a un período de fiscalización con multas y retiros “. Asimismo, Muñoz expresó que cuando los scooters superan el límite de velocidad son inseguros y muy molestos para otros vehículos, cuando es la calle o también cuando van por la vereda o por las ciclovías, detallando que la infracción es sancionada como una falta grave, por lo que se procede a retirar el vehículo y a pasar una multa entre 1 y 1,5 UTM ($70.000 y $100.000). El ministro Muñoz complementó que “si un vehículo está preparado para exceder los 25 km/h, si su motor lo permite, entonces nuestra regulación lo deja de tipificar como un “ciclo” (...), sino que pasa a ser un vehículo motorizado. Y a los vehículos motorizados en Chile se les exige revisión técnica, permiso de circulación y patente. Fuente: Publimetro
La empresa chilena Expedio , dedicada al servicio de scooters eléctricos, anunció el cierre definitivo de sus operaciones en Viña del Mar, tras sufrir el robo y vandalización del 80% de su flota. Con apenas 10 meses de funcionamiento, la compañía comunicó la noticia a través de sus redes sociales, señalando la inseguridad en la ciudad como el principal factor de su decisión. “Queremos agradecer profundamente a todos quienes nos acompañaron durante estos meses. Sin embargo, con mucha tristeza, hemos tomado la difícil decisión de cesar nuestras operaciones en esta ciudad”, indicaron en el comunicado publicado en Instagram. Patricia Solano, dueña de Expedio, explicó que la situación se tornó insostenible. “Nos han robado, nos han vandalizado. Nosotros llegamos a Viña del Mar a prestar un servicio, no a perseguir a los ladrones ni a las personas que nos vandalizan”, comentó en un video difundido por redes sociales. Según relató, desde la primera semana comenzaron a perder scooters, que luego eran encontrados en ferias o zonas rurales como Olmué, muchas veces inutilizados o revendidos. “Era toda una mafia”, lamentó en conversación con El Mercurio de Valparaíso. “Lamentablemente, hemos tenido que recuperar nuestros scooters, porque nos robaron el 80% de nuestra flota”, sostuvo la mujer. La inversión inicial de Expedio alcanzó los 350 mil dólares, una cifra significativa para una empresa chilena de menor tamaño que buscaba posicionarse en el mercado local. “No somos Uber, no somos Woosh. Somos una empresa chilena que invirtió sus ahorros en esto y lo hemos perdido todo”, señaló Solano al citado medio. A pesar de los intentos por frenar los robos, la empresaria afirmó que no obtuvo respuestas concretas tras acudir al Municipio de Viña del Mar, la Policía de Investigaciones (PDI) y Carabineros. “Aquí no hay culpables. La ciudad está insegura y nadie puede asegurarnos que no nos robarán el 20% que nos queda”, concluyó. Fuente: Publimetro