La NASA ha convocado a un comité de observación para estudiar el comportamiento, composición química y trayectoria del cometa interestelar 3I/ATLAS, que podría ser más antiguo que el propio Sol. Este cuerpo celeste es uno de los pocos objetos de su tipo detectados en la historia y varias agencias espaciales esperan poder estudiarlo en detalle mientras se desplaza rápidamente al interior de nuestro Sistema Solar. Según reporta La Nación de Costa Rica, el cometa 3I/ATLAS viaja a una velocidad de 60 kilómetros por segundo, el doble de la velocidad a la que se mueve la Tierra en su órbita. Esta velocidad se ve potenciada por su acercamiento al Sol y por su origen más allá del Sistema Solar. A diferencia de los asteroides, los cometas están compuestos de hielo y polvo, lo que provoca que al acercarse al sol se calienten y comiencen a liberar gases formando sus características colas que pueden extenderse por millones de kilómetros. Siendo un objeto interestelar, es decir, formado en otro sistema planetario, el análisis químico del 3I/ATLAS podría revelar materiales anteriores a la formación del Sistema Solar y generar nuevas teorías sobre la evolución de otros sistemas estelares. Los datos recopilados por astrónomos indican que el mayor punto de acercamiento del 3I/ATLAS con la Tierra ocurrirá el próximo 19 de diciembre, cuando pase a una distancia de 1,8 unidades astronómicas, equivalente a unos 270 millones de kilómetros. Aunque no será visible a simple vista, podrá observarse con telescopios medianos y grandes ubicados en regiones con cielos despejados, como en el norte de Chile. A pesar de estar bajo monitoreo de la Red Internacional para la Alerta de Asteroides de la NASA, no se ha emitido ninguna advertencia de impacto por parte del cometa. Solo se ha organizado una campaña de observación científica para estudiar este fenómeno astronómico único. Fuente: Meganoticias
En 1990, Carl Sagan convenció a la NASA de girar la sonda Voyager 1, a 6 000 millones de kilómetros, para fotografiar la Tierra. El resultado fue nuestro planeta como nunca se había visto, que conmovió a Sagan y lo inspiró a escribir su célebre reflexión Un punto azul pálido en 1994. Es la siguiente: “Mira de nuevo ese punto. Ese es aquí. Ese es el hogar. Esos somos nosotros. Sobre él, todos los que amas, todos los que conoces, todos los de los que has oído hablar, todos los seres humanos que alguna vez han existido, vivieron sus vidas. El conjunto de nuestra alegría y sufrimiento, miles de religiones, ideologías y doctrinas económicas confiadas, cada cazador y recolector, cada héroe y cobarde, cada creador y destructor de civilizaciones, cada rey y campesino, cada joven pareja enamorada, cada madre y padre, cada niño esperanzado, inventor y explorador, cada maestro de moral, cada político corrupto, cada «superestrella», cada «líder supremo», cada santo y pecador en la historia de nuestra especie vivieron allí: en una mota de polvo suspendida en un rayo de sol. La Tierra es un escenario muy pequeño en una vasta arena cósmica. Piensa en los ríos de sangre derramados por todos esos generales y emperadores para que, en gloria y triunfo, pudieran convertirse en los amos momentáneos de una fracción de un punto. Piensa en las interminables crueldades que los habitantes de un rincón de este píxel visitan sobre los apenas distinguibles habitantes de algún otro rincón, cuán frecuentes son sus malentendidos, cuán ansiosos están de matarse unos a otros, cuán fervientes sus odios. Nuestras posturas, nuestra supuesta importancia personal, la ilusión de que tenemos una posición privilegiada en el Universo, son desafiadas por este punto de luz pálida. Nuestro planeta es una mota solitaria en la gran oscuridad cósmica envolvente. En nuestra oscuridad, en toda esta inmensidad, no hay indicios de que la ayuda vendrá de otra parte para salvarnos de nosotros mismos. La Tierra es el único mundo conocido hasta ahora que alberga vida. No hay ningún otro lugar, al menos en un futuro próximo, al que nuestra especie pueda migrar. Visitar, sí. Establecernos, todavía no. Nos guste o no, por el momento la Tierra es donde nos mantenemos firmes. Se ha dicho que la astronomía es una experiencia de humildad y construcción de carácter. Quizás no haya mejor demostración de la locura de las presunciones humanas que esta imagen distante de nuestro diminuto mundo. Para mí, subraya nuestra responsabilidad de tratarnos más amablemente los unos a los otros y de preservar y apreciar el punto azul pálido, el único hogar que hemos conocido”.
La Prueba de Redirección de Doble Asteroide (DART) de la NASA, construida y administrada por el Laboratorio de Física Aplicada (APL) de Johns Hopkins para la Oficina de Coordinación de Defensa Planetaria (PDCO) de la NASA, fue la primera demostración de tecnología de defensa planetaria del mundo que validó una técnica de desviación de asteroides utilizando una nave espacial con impactador cinético. Lanzada el 24 de noviembre de 2022 a bordo de un cohete SpaceX Falcon 9 desde el Complejo de Lanzamiento Espacial 4 Este de la Base de la Fuerza Espacial Vandenberg en California, DART viajó durante más de 10 meses antes de colisionar intencionalmente con la luna del asteroide Dimorphos, un pequeño objeto celeste de tan solo 160 metros de diámetro. Dimorphos orbita un asteroide más grande, Didymos, de 780 metros, y forma parte del sistema binario de asteroides Didymos. Ni Didymos ni Dimorphos representan una amenaza de impacto para la Tierra antes o después de la demostración de impacto cinético de DART. El viaje de ida de la misión confirmó que la NASA puede navegar con éxito una nave espacial para colisionar intencionalmente con un asteroide para cambiar su trayectoria orbital. El único instrumento de DART, la Cámara de Reconocimiento y Asteroides Didymos para navegación óptica (DRACO), trabajando junto con un sofisticado sistema de guía, navegación y control que trabajó en tándem con algoritmos de Navegación Autónoma en Tiempo Real para Maniobra de Cuerpos Pequeños (SMART Nav), permitió a DART identificar y distinguir entre los dos asteroides, apuntar al objeto más pequeño y guiar la nave espacial con forma de caja de 1,260 libras (570 kilogramos) a través de los últimos 56,000 millas (90,000 kilómetros) del espacio hacia Dimorphos a aproximadamente 14,000 millas (22,530 kilómetros) por hora. Las imágenes finales de DRACO obtenidas por la nave espacial segundos antes del impacto revelaron la superficie de Dimorphos en detalle de cerca. Quince días antes del impacto, el CubeSat compañero de DART, Light Italian CubeSat for Imaging of Asteroids (LICIACube), proporcionado por la Agencia Espacial Italiana, se desplegó desde la nave espacial para capturar imágenes del impacto de DART y de la nube de materia expulsada del asteroide resultante. En las semanas posteriores al impacto cinético de DART, cuando el par de asteroides se encontraba a 11 millones de kilómetros (7 millones de millas) de la Tierra, un equipo mundial de astrónomos utilizó docenas de telescopios estacionados en todo el mundo y en el espacio para estudiar el sistema de asteroides Didymos. Después de un análisis más profundo, la NASA confirmó que el impacto a hipervelocidad de DART con Dimorphos alteró con éxito la órbita de Dimorphos alrededor de Didymos, lo que marcó la primera vez que la humanidad cambiaba deliberadamente el movimiento de un objeto celeste y la primera demostración de tecnología de desviación de asteroides. Antes del impacto de DART, Dimorphos orbitaba Didymos una vez cada 11 horas y 55 minutos, y el impacto a hipervelocidad de DART acortó este tiempo a 11 horas y 23 minutos, una diferencia de 32 minutos. Esta desviación es el resultado del impacto cinético de DART y la eyecta: las muchas toneladas de roca asteroidal desplazadas y lanzadas al espacio por el impacto. El retroceso de esta explosión de escombros aumentó sustancialmente el empuje de DART contra Dimorphos, un poco como un chorro de aire que sale de un globo y lo envía en la dirección opuesta. El éxito de DART está impulsando el avance de los modelos teóricos de deflexión de asteroides y permitiendo a los investigadores comprender mejor cómo y cuándo se podría utilizar una nave espacial con impacto cinético para desviar un asteroide que se dirige a la Tierra. Sin embargo, aún se necesita más investigación para comprender plenamente si una nave espacial con impacto cinético sería tan eficaz para mitigar el impacto de un objeto más sólido como el Dimorphos, un acúmulo de escombros que expulsaría menos material al espacio al colisionar con una nave espacial. Por lo tanto, debemos seguir probando otras técnicas de deflexión para contar con un arsenal variado de opciones de respuesta para la defensa planetaria que responda mejor al tipo de objeto que podríamos tener que desviar.
La NASA planea construir un reactor nuclear estadounidense en la Luna para que, a partir de 2030, opere como parte de la carrera espacial con China. Así lo afirmó Sean Duffy, administrador interino de la agencia especial norteamericana, quien es también secretario de Transporte en la actual Administración de Donald Trump. Este no es un nuevo concepto, esto se ha discutido bajo Trump 1 (2017-2021), bajo (la presidencia de) Biden (2021-2025), pero estamos en la carrera hacia la Luna y en la carrera hacia la Luna con China, y para tener una base en la Luna necesitamos energía, dijo Duffy en una rueda de prensa, confirmando el proyecto que, primeramente, informó el medio Politico con base en un reporte interno de la NASA. El Gobierno de Estados Unidos ya ha gastado cientos de millones de dólares estudiando si es posible construir el reactor, aseveró Duffy, que prometió un anuncio oficial del tema más adelante. El reactor generará 100 kilowatts de energía, la cantidad de electricidad equivalente a la que requiere una casa de 186 metros cuadrados cada tres día y medio, describió el secretario. Nos han dado instrucciones para empezar a desplegar nuestra tecnología, para movernos y hacer de esto una realidad, añadió el funcionario. El jefe de la NASA reconoció que no es una tecnología enorme, pero argumentó que la energía es importante y, si se habla de sostener vida en la Luna y después ir a Marte, esta tecnología es críticamente importante. NASA: Queremos reclamar la mejor parte de la Luna para Estados Unidos Duffy enmarcó el proyecto dentro de la carrera hacia el espacio que ha impulsado Trump, quien en su primera gestión creó la Fuerza Espacial (Space Force) como parte de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos. Si vamos a involucrarnos en la carrera hacia la Luna, hacia Marte, tenemos que ponernos las pilas. Tenemos que enfocar nuestros esfuerzos en ir a la Luna, que es lo que vamos a hacer, comentó. El director interino recordó que la NASA lanzará a inicios del próximo año la misión Artemis 2 para que cuatro astronautas den la vuelta a la Luna, mientras que Artemis 3 buscará que los tripulantes hagan un alunizaje y permanezcan seis días en el satélite, el doble de tiempo que el récord previo. Después de ello, la NASA espera enviar insumos a la Luna para comenzar a construir una base, agregó. Hay una cierta parte de la Luna que todo el mundo sabe que es la mejor. Tenemos hielo ahí, tenemos luz del Sol ahí, queremos llegar ahí primero y reclamarla para Estados Unidos, manifestó.
La NASA confirmó el motivo por el que no encontramos vida en Marte Jennifer Stern es una astrobióloga del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA que lideró el estudio, que podría cambiar por completo los hallazgos científicos hasta la fecha. Una de las razones que explica sobre la ausencia de vida en el planeta rojo, es el agua salada. La misma contiene una mezcla química que es letal para los seres vivos según explican desde ScienceAlert. Más resultados que explican por qué no hay vida en Marte Otro hallazgo que se reveló fue sobre el suelo marciano. El mismo se conforma de perclorato, un compuesto altamente oxidante capaz de destruir moléculas orgánicas lo que vuelve imposible la supervivencia microbiana en el espacio. Para comprobar esto, se llevaron a cabo varios experimentos donde se expuso a microorganismos terrestres a soluciones que simulan las salmueras marcianas. Los resultados fueron contundentes: hasta los microbios más resistentes del planeta Tierra no sobrevivieron a estas condiciones extremas. Esto confirmó que el agua líquida de Marte, lejos de pensarse como un recurso vital para los seres vivos, actúa como un ambiente tóxico. Sin embargo, los científicos no descartaron por completo la posibilidad de encontrar vida en el planeta, ya que organismos marcianos podrían haber evolucionado y desarrollado una defensa única para sobrevivir frente a las condiciones del lugar.
La NASA ha convocado a un comité de observación para estudiar el comportamiento, composición química y trayectoria del cometa interestelar 3I/ATLAS, que podría ser más antiguo que el propio Sol. Este cuerpo celeste es uno de los pocos objetos de su tipo detectados en la historia y varias agencias espaciales esperan poder estudiarlo en detalle mientras se desplaza rápidamente al interior de nuestro Sistema Solar. Según reporta La Nación de Costa Rica, el cometa 3I/ATLAS viaja a una velocidad de 60 kilómetros por segundo, el doble de la velocidad a la que se mueve la Tierra en su órbita. Esta velocidad se ve potenciada por su acercamiento al Sol y por su origen más allá del Sistema Solar. A diferencia de los asteroides, los cometas están compuestos de hielo y polvo, lo que provoca que al acercarse al sol se calienten y comiencen a liberar gases formando sus características colas que pueden extenderse por millones de kilómetros. Siendo un objeto interestelar, es decir, formado en otro sistema planetario, el análisis químico del 3I/ATLAS podría revelar materiales anteriores a la formación del Sistema Solar y generar nuevas teorías sobre la evolución de otros sistemas estelares. Los datos recopilados por astrónomos indican que el mayor punto de acercamiento del 3I/ATLAS con la Tierra ocurrirá el próximo 19 de diciembre, cuando pase a una distancia de 1,8 unidades astronómicas, equivalente a unos 270 millones de kilómetros. Aunque no será visible a simple vista, podrá observarse con telescopios medianos y grandes ubicados en regiones con cielos despejados, como en el norte de Chile. A pesar de estar bajo monitoreo de la Red Internacional para la Alerta de Asteroides de la NASA, no se ha emitido ninguna advertencia de impacto por parte del cometa. Solo se ha organizado una campaña de observación científica para estudiar este fenómeno astronómico único. Fuente: Meganoticias
En 1990, Carl Sagan convenció a la NASA de girar la sonda Voyager 1, a 6 000 millones de kilómetros, para fotografiar la Tierra. El resultado fue nuestro planeta como nunca se había visto, que conmovió a Sagan y lo inspiró a escribir su célebre reflexión Un punto azul pálido en 1994. Es la siguiente: “Mira de nuevo ese punto. Ese es aquí. Ese es el hogar. Esos somos nosotros. Sobre él, todos los que amas, todos los que conoces, todos los de los que has oído hablar, todos los seres humanos que alguna vez han existido, vivieron sus vidas. El conjunto de nuestra alegría y sufrimiento, miles de religiones, ideologías y doctrinas económicas confiadas, cada cazador y recolector, cada héroe y cobarde, cada creador y destructor de civilizaciones, cada rey y campesino, cada joven pareja enamorada, cada madre y padre, cada niño esperanzado, inventor y explorador, cada maestro de moral, cada político corrupto, cada «superestrella», cada «líder supremo», cada santo y pecador en la historia de nuestra especie vivieron allí: en una mota de polvo suspendida en un rayo de sol. La Tierra es un escenario muy pequeño en una vasta arena cósmica. Piensa en los ríos de sangre derramados por todos esos generales y emperadores para que, en gloria y triunfo, pudieran convertirse en los amos momentáneos de una fracción de un punto. Piensa en las interminables crueldades que los habitantes de un rincón de este píxel visitan sobre los apenas distinguibles habitantes de algún otro rincón, cuán frecuentes son sus malentendidos, cuán ansiosos están de matarse unos a otros, cuán fervientes sus odios. Nuestras posturas, nuestra supuesta importancia personal, la ilusión de que tenemos una posición privilegiada en el Universo, son desafiadas por este punto de luz pálida. Nuestro planeta es una mota solitaria en la gran oscuridad cósmica envolvente. En nuestra oscuridad, en toda esta inmensidad, no hay indicios de que la ayuda vendrá de otra parte para salvarnos de nosotros mismos. La Tierra es el único mundo conocido hasta ahora que alberga vida. No hay ningún otro lugar, al menos en un futuro próximo, al que nuestra especie pueda migrar. Visitar, sí. Establecernos, todavía no. Nos guste o no, por el momento la Tierra es donde nos mantenemos firmes. Se ha dicho que la astronomía es una experiencia de humildad y construcción de carácter. Quizás no haya mejor demostración de la locura de las presunciones humanas que esta imagen distante de nuestro diminuto mundo. Para mí, subraya nuestra responsabilidad de tratarnos más amablemente los unos a los otros y de preservar y apreciar el punto azul pálido, el único hogar que hemos conocido”.
La Prueba de Redirección de Doble Asteroide (DART) de la NASA, construida y administrada por el Laboratorio de Física Aplicada (APL) de Johns Hopkins para la Oficina de Coordinación de Defensa Planetaria (PDCO) de la NASA, fue la primera demostración de tecnología de defensa planetaria del mundo que validó una técnica de desviación de asteroides utilizando una nave espacial con impactador cinético. Lanzada el 24 de noviembre de 2022 a bordo de un cohete SpaceX Falcon 9 desde el Complejo de Lanzamiento Espacial 4 Este de la Base de la Fuerza Espacial Vandenberg en California, DART viajó durante más de 10 meses antes de colisionar intencionalmente con la luna del asteroide Dimorphos, un pequeño objeto celeste de tan solo 160 metros de diámetro. Dimorphos orbita un asteroide más grande, Didymos, de 780 metros, y forma parte del sistema binario de asteroides Didymos. Ni Didymos ni Dimorphos representan una amenaza de impacto para la Tierra antes o después de la demostración de impacto cinético de DART. El viaje de ida de la misión confirmó que la NASA puede navegar con éxito una nave espacial para colisionar intencionalmente con un asteroide para cambiar su trayectoria orbital. El único instrumento de DART, la Cámara de Reconocimiento y Asteroides Didymos para navegación óptica (DRACO), trabajando junto con un sofisticado sistema de guía, navegación y control que trabajó en tándem con algoritmos de Navegación Autónoma en Tiempo Real para Maniobra de Cuerpos Pequeños (SMART Nav), permitió a DART identificar y distinguir entre los dos asteroides, apuntar al objeto más pequeño y guiar la nave espacial con forma de caja de 1,260 libras (570 kilogramos) a través de los últimos 56,000 millas (90,000 kilómetros) del espacio hacia Dimorphos a aproximadamente 14,000 millas (22,530 kilómetros) por hora. Las imágenes finales de DRACO obtenidas por la nave espacial segundos antes del impacto revelaron la superficie de Dimorphos en detalle de cerca. Quince días antes del impacto, el CubeSat compañero de DART, Light Italian CubeSat for Imaging of Asteroids (LICIACube), proporcionado por la Agencia Espacial Italiana, se desplegó desde la nave espacial para capturar imágenes del impacto de DART y de la nube de materia expulsada del asteroide resultante. En las semanas posteriores al impacto cinético de DART, cuando el par de asteroides se encontraba a 11 millones de kilómetros (7 millones de millas) de la Tierra, un equipo mundial de astrónomos utilizó docenas de telescopios estacionados en todo el mundo y en el espacio para estudiar el sistema de asteroides Didymos. Después de un análisis más profundo, la NASA confirmó que el impacto a hipervelocidad de DART con Dimorphos alteró con éxito la órbita de Dimorphos alrededor de Didymos, lo que marcó la primera vez que la humanidad cambiaba deliberadamente el movimiento de un objeto celeste y la primera demostración de tecnología de desviación de asteroides. Antes del impacto de DART, Dimorphos orbitaba Didymos una vez cada 11 horas y 55 minutos, y el impacto a hipervelocidad de DART acortó este tiempo a 11 horas y 23 minutos, una diferencia de 32 minutos. Esta desviación es el resultado del impacto cinético de DART y la eyecta: las muchas toneladas de roca asteroidal desplazadas y lanzadas al espacio por el impacto. El retroceso de esta explosión de escombros aumentó sustancialmente el empuje de DART contra Dimorphos, un poco como un chorro de aire que sale de un globo y lo envía en la dirección opuesta. El éxito de DART está impulsando el avance de los modelos teóricos de deflexión de asteroides y permitiendo a los investigadores comprender mejor cómo y cuándo se podría utilizar una nave espacial con impacto cinético para desviar un asteroide que se dirige a la Tierra. Sin embargo, aún se necesita más investigación para comprender plenamente si una nave espacial con impacto cinético sería tan eficaz para mitigar el impacto de un objeto más sólido como el Dimorphos, un acúmulo de escombros que expulsaría menos material al espacio al colisionar con una nave espacial. Por lo tanto, debemos seguir probando otras técnicas de deflexión para contar con un arsenal variado de opciones de respuesta para la defensa planetaria que responda mejor al tipo de objeto que podríamos tener que desviar.
La NASA planea construir un reactor nuclear estadounidense en la Luna para que, a partir de 2030, opere como parte de la carrera espacial con China. Así lo afirmó Sean Duffy, administrador interino de la agencia especial norteamericana, quien es también secretario de Transporte en la actual Administración de Donald Trump. Este no es un nuevo concepto, esto se ha discutido bajo Trump 1 (2017-2021), bajo (la presidencia de) Biden (2021-2025), pero estamos en la carrera hacia la Luna y en la carrera hacia la Luna con China, y para tener una base en la Luna necesitamos energía, dijo Duffy en una rueda de prensa, confirmando el proyecto que, primeramente, informó el medio Politico con base en un reporte interno de la NASA. El Gobierno de Estados Unidos ya ha gastado cientos de millones de dólares estudiando si es posible construir el reactor, aseveró Duffy, que prometió un anuncio oficial del tema más adelante. El reactor generará 100 kilowatts de energía, la cantidad de electricidad equivalente a la que requiere una casa de 186 metros cuadrados cada tres día y medio, describió el secretario. Nos han dado instrucciones para empezar a desplegar nuestra tecnología, para movernos y hacer de esto una realidad, añadió el funcionario. El jefe de la NASA reconoció que no es una tecnología enorme, pero argumentó que la energía es importante y, si se habla de sostener vida en la Luna y después ir a Marte, esta tecnología es críticamente importante. NASA: Queremos reclamar la mejor parte de la Luna para Estados Unidos Duffy enmarcó el proyecto dentro de la carrera hacia el espacio que ha impulsado Trump, quien en su primera gestión creó la Fuerza Espacial (Space Force) como parte de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos. Si vamos a involucrarnos en la carrera hacia la Luna, hacia Marte, tenemos que ponernos las pilas. Tenemos que enfocar nuestros esfuerzos en ir a la Luna, que es lo que vamos a hacer, comentó. El director interino recordó que la NASA lanzará a inicios del próximo año la misión Artemis 2 para que cuatro astronautas den la vuelta a la Luna, mientras que Artemis 3 buscará que los tripulantes hagan un alunizaje y permanezcan seis días en el satélite, el doble de tiempo que el récord previo. Después de ello, la NASA espera enviar insumos a la Luna para comenzar a construir una base, agregó. Hay una cierta parte de la Luna que todo el mundo sabe que es la mejor. Tenemos hielo ahí, tenemos luz del Sol ahí, queremos llegar ahí primero y reclamarla para Estados Unidos, manifestó.
La NASA confirmó el motivo por el que no encontramos vida en Marte Jennifer Stern es una astrobióloga del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA que lideró el estudio, que podría cambiar por completo los hallazgos científicos hasta la fecha. Una de las razones que explica sobre la ausencia de vida en el planeta rojo, es el agua salada. La misma contiene una mezcla química que es letal para los seres vivos según explican desde ScienceAlert. Más resultados que explican por qué no hay vida en Marte Otro hallazgo que se reveló fue sobre el suelo marciano. El mismo se conforma de perclorato, un compuesto altamente oxidante capaz de destruir moléculas orgánicas lo que vuelve imposible la supervivencia microbiana en el espacio. Para comprobar esto, se llevaron a cabo varios experimentos donde se expuso a microorganismos terrestres a soluciones que simulan las salmueras marcianas. Los resultados fueron contundentes: hasta los microbios más resistentes del planeta Tierra no sobrevivieron a estas condiciones extremas. Esto confirmó que el agua líquida de Marte, lejos de pensarse como un recurso vital para los seres vivos, actúa como un ambiente tóxico. Sin embargo, los científicos no descartaron por completo la posibilidad de encontrar vida en el planeta, ya que organismos marcianos podrían haber evolucionado y desarrollado una defensa única para sobrevivir frente a las condiciones del lugar.