Aunque a Ricardo Gareca no le guste el término, el momento que está viviendo la selección chilena es vergonzoso. Claramente, el entrenador no es el único culpable, pero sí tiene una buena cuota de responsabilidad, pues es quien finalmente toma las decisiones. PUBLICIDAD Hay varias razones que explican este presente negro de la “Roja”, algunas de ellas estadísticas y otras de percepción, basadas en hechos irrefutables. A continuación, un repaso a la “tormenta perfecta” que tiene al equipo nacional prácticamente fuera del Mundial del 2026, cuando todavía restan 10 fechas por jugar. Las derrotas históricas y la debilidad en casa Una cosa es pasar por un mal momento y otra muy distinta es perder contra rivales que nunca te habían podido vencer. Es el caso del papelón sufrido el martes a manos de Bolivia, que jamás había ganado en Chile por los puntos y que, como visitante, solamente doblegó antes a Venezuela (dos veces) y Perú por Clasificatorias, y que además llevaba 31 años sin celebrar como forastera. No es la única caída dolorosa de este proceso, pues si bien la “Roja” ya había sucumbido en suelo venezolano, no había sido “bailada” como lo fue en octubre del año pasado. Con un 3-0 lapidario en Maturín, fue la primera vez que la “Vinotinto” le convirtió tres goles el equipo nacional, tanto en partidos oficiales como en duelos amistosos. A lo anterior se agrega que la escuadra criolla no se ha hecho fuerte como local, clave para aspirar a llegar a un Mundial. Con apenas un triunfo, el 2-0 sobre los peruanos, empató frente a Colombia y Paraguay, obviamente con sendos 0-0, y sumó el revés de esta semana, para un paupérrimo 41.6 por ciento de rendimiento en condición de anfitriona. Un mal arranque sin precedentes La selección chilena ya llegaba al partido ante Bolivia con su peor comienzo en la historia de las Clasificatorias sudamericanas, por lo que la derrota del martes solamente profundizó esa estadística negativa. Con apenas cinco puntos de 24 posibles, la “Roja” acumula un pobrísimo 20.8 por ciento de rendimiento, con sólo cuatro goles a favor y 12 en contra. El otro inicio para el olvido fue el del proceso anterior, para el Mundial de Qatar 2022, confirmando un declive sostenido en los últimos tiempos, que empezó en la recta final del camino hacia Rusia 2018. En las ocho primeras fechas de las Eliminatorias pasadas, el equipo nacional llevaba siete unidades, con una performance de 29.1%. PUBLICIDAD Incluso, en la penosa trayectoria rumbo al certamen planetario realizado en Corea del Sur y Japón en el 2002, donde terminó como colista de la tabla de posiciones, a largos cuatro cuerpos de Venezuela y Perú, la escuadra criolla llevaba una mejor cosecha a estas alturas. De hecho, tenía el doble de positivos, 10, para un 41.6% del puntaje. Una falta de finiquito desesperante Si bien no es cierto que Chile se generó múltiples oportunidades de gol el martes, como quiso hacer creer Gareca, sí es verdad que tuvo ocasiones que en otros tiempos terminaban adentro del arco, como el increíble cabezazo que falló Matías Catalán sobre el final del partido contra los bolivianos. Eso sí, estuvo lejos de parecerse al encuentro ante la propia “Verde” rumbo a Qatar 2022, donde la “Roja” sí mereció ganar. Ahora, la escasa puntería de la Selección no puede achacársele exclusivamente al “Tigre”, pues ya venían hilándose sequías históricas en los procesos recientes, aunque actualmente el problema se agudizó. Si no es por el discutido tanto que Carlos Lampe le regala a Eduardo Vargas, estaríamos hablando de ocho duelos oficiales sin convertir. Un entrenador nublado Gareca le había sacado el jugo a una selección peruana sin grandes nombres, por lo que asomaba como el DT ideal para una “Roja” que estaba en un proceso similar, ya sin las figuras de la “Generación Dorada”. Y si bien tuvo un arranque esperanzador en los amistosos, en los partidos oficiales ha tomado decisiones que denotan confusión. Contra Bolivia, el técnico planteó mal el encuentro desde el inicio, dejando fuera de la oncena estelar a uno que había sido de lo más rescatable en los tiempos recientes, Rodrigo Echeverría. Tuvo que corregir recién pasada la media hora con el ingreso de Vicente Pizarro, sacrificando a un Ben Brereton que estaba lejos de ser el peor de la cancha y ratificando que no lo tiene en buena consideración, vaya uno a saber por qué. En el complemento, el “Tigre” hizo entrar a un Gonzalo Tapia que, más allá de que respondió con personalidad, ni siquiera estaba entre los 26 citados originales. Ya las declaraciones del “Tigre” en la conferencia de prensa posterior, diciendo que le gustó el equipo y que se queda tranquilo por la actitud de sus dirigidos, reflejan un desconcierto y generan incredulidad. Un plantel sin jerarquía Puede sonar fuerte, pero la realidad lo ratifica, como el hecho de que por primera vez después de casi dos décadas, no habrá ningún chileno disputando la Champions League. Y eso que la “Orejona” de este año tiene más equipos, 36, pero así y todo no pudo entrar ningún futbolista nacional, con Darío Osorio quedándose a las puertas. Además, solamente quedan cinco jugadores criollos en los grandes torneos de Europa, más encima sin protagonismo. Alexis Sánchez está lesionado en el Udinese, donde Damián Pizarro ni asoma; Guillermo Maripán acaba de llegar al Torino; Brereton está hilando una racha histórica sin ganar en la Premier League, ahora en el Southampton; y Gabriel Suazo ha perdido terreno en el Toulouse. Entonces, hay que conformarse con seleccionados en ligas de segundo orden del “Viejo Continente”, como la rusa, la danesa o la Championship inglesa, o con todos los que hacen algo en Argentina, aparte de los infaltables “mexicanos” y uno que otro que milita en Brasil. Es más, en esta doble fecha Fifa, vieron acción cinco que se desempeñan en el desprestigiado fútbol chileno. Generaciones de “cristal” Con la “Generación Dorada” prácticamente fuera, los llamados a relevarla no han estado a la altura, empezando por algunos ya treintañeros como Diego Valdés, que cuando parecía afirmarse en la Selección, se ha lesionado una vez tras otra. Otro de la misma edad que asomaba como uno de los puntales del recambio, Paulo Díaz, no da pie con bola en la “Roja”, pese a que en River Plate destaca, mismo caso que Erick Pulgar en el Flamengo. Para más mala suerte, el joven que llegaba más encendido, Bruno Barticciotto, que tal vez podía ser una solución para el problema de finiquito, también quedó al margen por lesión. El otro que arribaba prendido era Osorio, pero cada vez que se ha puesto la camiseta del equipo nacional para un partido oficial, ha defraudado, con una falta de actitud desconcertante. Después están los casos de aquellos jugadores que se hacen expulsar o suspender por acumulación de tarjetas amarillas constantemente. Marcelino Núñez es uno de ellos y no termina de consolidarse en el combinado criollo, mientras que los mismos Díaz y Pulgar, además de Catalán, quedaron castigados para recibir a Brasil en octubre.
Desde hace 16 años, cuando Claudio Bravo asumió la capitanía de la selección chilena, la jineta pasó principalmente por su brazo y por los de Gary Medel, Arturo Vidal y Alexis Sánchez. Hoy, el arquero está retirado y el delantero está lesionado, mientras que el defensa y el volante no están por decisión técnica. PUBLICIDAD Más allá de quién porte el brazalete este jueves contra Argentina en Buenos Aires y el próximo martes frente a Bolivia en Santiago, hay varios jugadores que están llamados a comandar a la “Roja” ante la falta de los grandes referentes. Un grupo está compuesto por los bicampeones de América que van quedando, mientras que otro está integrado por un conjunto de treintañeros que hace rato tienen un lugar ganado en el plantel. También hay uno que no pertenece a ninguno de estos dos conjuntos, pero que es líder en su club. A continuación, un repaso a los que deben llevar la voz cantante dadas las ausencias de los “históricos”. El trío de los bicampeones En la actual nómina de Ricardo Gareca solamente hay tres jugadores que estuvieron presentes en los títulos de la Copa América del 2015 y del 2016. Uno de ellos es Mauricio Isla, el quinto futbolista con más partidos en la historia de la “Roja”, con 142, y otro es Eduardo Vargas, el séptimo en este apartado, con 112. Sin embargo, siempre han tenido un rol secundario en cuanto a los liderazgos del equipo y, de hecho, nunca han sido capitanes, como sí lo ha sido el tercero de este grupo, Eugenio Mena. El lateral izquierdo, que tiene 72 encuentros por la Selección y se ubica 14º en este registro, sabe lo que es portar la jineta. Lo hizo desde el primer minuto en junio del año pasado, en el amistoso ante Cuba, y también relevó a Gary Medel contra Túnez en la Copa Kirin del 2022, cuando el “Pitbull” fue reemplazado. En condiciones normales, el “Chueco” sería suplente de Gabriel Suazo, otro prospecto de líder futuro, pero este último está suspendido para la visita a Argentina. El “club de los 30″ Hay un conjunto de cuatro jugadores que tienen exactamente tres décadas de vida y que ya llevan un buen tiempo siendo recurrentes en el combinado nacional. Dos son los centrales, Paulo Díaz y Guillermo Maripán, quienes han sabido portar la jineta en equipos importantes, como River Plate y Mónaco, respectivamente. PUBLICIDAD Además, el zaguero del “Millonario” ha sido capitán dos veces en la Selección, ante Honduras en el 2019 y frente a Ghana en la Copa Kirin del 2022. Claudio Baeza, quien regresa a la “Roja” tras más de dos años de ausencia, también llevó el brazalete en dos ocasiones, contra México y El Salvador, en el 2021. Completa este grupo Erick Pulgar, el único, sacando a Isla, Vargas y Mena, que puede ufanarse de ser campeón de América, ya que estuvo en la Copa Centenario del 2016, aunque el antofagastino tiene un perfil bajo. El otro treintañero que estaba llamado a liderar, pero que quedó fuera por lesión, es Diego Valdés. Gabriel Arias Si bien disputa la titularidad mano a mano con Brayan Cortés, es un referente natural dada su edad, 36 años, la misma que Isla y Mena, siendo los más veteranos del actual plantel. En la Selección le ha tocado estar casi siempre en un segundo plano, pero igual ya tiene 17 partidos jugados, incluida toda la Copa América del 2019, donde la “Roja” logró el tercer puesto. Además, ante la lesión de Bravo, fue el arquero contra Canadá en el último encuentro, en desmedro de su colega de Colo Colo. Aparte, en Racing porta la jineta desde hace un buen tiempo.
La última vez que la selección chilena anotó en un partido oficial fue el 12 de octubre del 2023. Aquella noche, venció por 2-0 a Perú en el estadio Monumental por las Clasificatorias sudamericanas, con tantos de Diego Valdés y Marcelino Núñez. PUBLICIDAD Desde entonces, tanto con Eduardo Berizzo como con Ricardo Gareca en la banca, a la “Roja” se le extravió el gol en encuentros por los puntos. Si bien el cuadro al mando del “Tigre” parecía solucionar la falta de finiquito en los amistosos, en la Copa América reapareció esta falencia peor que nunca. El “Equipo de Todos” se despidió del torneo continental sin convertir, por lo que ya suma seis duelos oficiales sin marcar. Y si no lo hace este jueves ante Argentina en Buenos Aires o el próximo martes contra Bolivia en el Nacional, la sequía se extenderá por prácticamente un año, ya que la siguiente presentación será recibiendo a Brasil el 10 del mes que viene. Para acabar con esta mala racha, el combinado nacional no cuenta con su artillero histórico, Alexis Sánchez, ni tampoco con el quinto en este registro de todos los tiempos, Arturo Vidal. Sí tiene a disposición al segundo, Eduardo Vargas, uno de los siete delanteros de la actual nómina, cuyos números desde la eliminación a manos de Canadá, el 29 de junio, revisamos a continuación. Carlos Palacios Desde el empate ante Canadá que significó la eliminación de la “Roja” de la última Copa América, el jugador de Colo Colo es el que más ha convertido, con tres goles. Sin embargo, dos de esos tantos fueron de penal, contra Unión Española y Ñublense, por el Campeonato Nacional, mientras que el restante fue frente a Deportes Santa Cruz, por la Copa Chile. Por la Selección lleva siete partidos y 186 minutos, sin anotar todavía. Darío Osorio Buscará reivindicarse después de la Copa América, a la cual llegó como una de las cartas prometedoras y estuvo muy lejos del nivel que muestra constantemente en el Midtjylland. Luego del torneo continental marcó dos veces, ante el Santa Coloma, por la fase previa de la Champions League, y el domingo contra el Silkeborg, por la Superliga danesa. Por el “Equipo de Todos” suma 11 encuentros y 450 minutos, con un gol, el de marzo a Francia. Víctor Dávila Es otro que llegaba a la Copa América con el cartel de figura y tampoco pudo cortar la sequía anotadora de la Selección en partidos oficiales. De hecho, su falta de gol se ha extendido a su club, el Cska Moscú, donde no convierte desde el 25 de mayo. Es más, sus últimos tantos fueron en el amistoso de junio ante Paraguay, donde marcó dos de los tres que acumula en la “Roja”, en 14 encuentros y 792 minutos. PUBLICIDAD Ben Brereton No ha podido anotar desde su arribo al Southampton y, de hecho, su último gol fue el lejano 4 de mayo, por el Sheffield United. En la Copa América tampoco pudo refrendar los buenos números con los que llegaba desde su ex club. En la Selección también acumula una larga sequía, desde el triplete a República Dominicana en junio del 2023, cuando marcó tres de los siete tantos que lleva por la “Roja”, en 33 partidos y 1.918 minutos. Eduardo Vargas Parecía resucitar en la Selección de la mano de Gareca, pero tampoco pudo hacerse presente en el marcador en la Copa América. Después del torneo continental lleva un par de goles por el Atlético Mineiro, uno ante el Sao Paulo y el otro el pasado domingo contra el Gremio, ambos por el Brasileirao. Su último tanto por la “Roja” fue en el amistoso de junio frente a Paraguay, para llegar a 42 en 112 partidos y 8.211 minutos. Jean Meneses Acaba de debutar por el Vasco da Gama proveniente del Toluca, donde marcó sus dos goles más recientes el 19 de abril. A la Selección vuelve después de una larga ausencia, ya que no defiende la camiseta nacional desde hace dos años. Por la “Roja” acumula tres tantos, el último en septiembre del 2021 visitando a Colombia por las Eliminatorias, en un total de 23 partidos y 1.245 minutos. Bruno Barticciotto Pasa por un excelente momento en Talleres de Córdoba, aunque desde la eliminación de la “Roja” de la Copa América, a la cual no fue, lleva solamente dos goles. Fueron ante Instituto e Independiente Rivadavia, ambos durante agosto por el torneo argentino. Por la Selección suma dos tantos en apenas un partido, ya que anotó dos veces en los 90 minutos que disputó contra República Dominicana, en junio del año pasado. Thomas Galdames lidera a los no delanteros Dentro de los que no son atacantes, el defensa del Krylya Sovetov marcó un doblete hace un par de domingos en la Premier League rusa. Williams Alarcón anotó dos goles para Huracán, uno en julio y otro en agosto, mientras que Vicente Pizarro convirtió para Colo Colo ante O’Higgins, por la Copa Chile, y Junior, por la Libertadores. Paulo Díaz y Rodrigo Echeverría tienen un tanto para River Plate y el “Globo”, respectivamente.
Aunque a Ricardo Gareca no le guste el término, el momento que está viviendo la selección chilena es vergonzoso. Claramente, el entrenador no es el único culpable, pero sí tiene una buena cuota de responsabilidad, pues es quien finalmente toma las decisiones. PUBLICIDAD Hay varias razones que explican este presente negro de la “Roja”, algunas de ellas estadísticas y otras de percepción, basadas en hechos irrefutables. A continuación, un repaso a la “tormenta perfecta” que tiene al equipo nacional prácticamente fuera del Mundial del 2026, cuando todavía restan 10 fechas por jugar. Las derrotas históricas y la debilidad en casa Una cosa es pasar por un mal momento y otra muy distinta es perder contra rivales que nunca te habían podido vencer. Es el caso del papelón sufrido el martes a manos de Bolivia, que jamás había ganado en Chile por los puntos y que, como visitante, solamente doblegó antes a Venezuela (dos veces) y Perú por Clasificatorias, y que además llevaba 31 años sin celebrar como forastera. No es la única caída dolorosa de este proceso, pues si bien la “Roja” ya había sucumbido en suelo venezolano, no había sido “bailada” como lo fue en octubre del año pasado. Con un 3-0 lapidario en Maturín, fue la primera vez que la “Vinotinto” le convirtió tres goles el equipo nacional, tanto en partidos oficiales como en duelos amistosos. A lo anterior se agrega que la escuadra criolla no se ha hecho fuerte como local, clave para aspirar a llegar a un Mundial. Con apenas un triunfo, el 2-0 sobre los peruanos, empató frente a Colombia y Paraguay, obviamente con sendos 0-0, y sumó el revés de esta semana, para un paupérrimo 41.6 por ciento de rendimiento en condición de anfitriona. Un mal arranque sin precedentes La selección chilena ya llegaba al partido ante Bolivia con su peor comienzo en la historia de las Clasificatorias sudamericanas, por lo que la derrota del martes solamente profundizó esa estadística negativa. Con apenas cinco puntos de 24 posibles, la “Roja” acumula un pobrísimo 20.8 por ciento de rendimiento, con sólo cuatro goles a favor y 12 en contra. El otro inicio para el olvido fue el del proceso anterior, para el Mundial de Qatar 2022, confirmando un declive sostenido en los últimos tiempos, que empezó en la recta final del camino hacia Rusia 2018. En las ocho primeras fechas de las Eliminatorias pasadas, el equipo nacional llevaba siete unidades, con una performance de 29.1%. PUBLICIDAD Incluso, en la penosa trayectoria rumbo al certamen planetario realizado en Corea del Sur y Japón en el 2002, donde terminó como colista de la tabla de posiciones, a largos cuatro cuerpos de Venezuela y Perú, la escuadra criolla llevaba una mejor cosecha a estas alturas. De hecho, tenía el doble de positivos, 10, para un 41.6% del puntaje. Una falta de finiquito desesperante Si bien no es cierto que Chile se generó múltiples oportunidades de gol el martes, como quiso hacer creer Gareca, sí es verdad que tuvo ocasiones que en otros tiempos terminaban adentro del arco, como el increíble cabezazo que falló Matías Catalán sobre el final del partido contra los bolivianos. Eso sí, estuvo lejos de parecerse al encuentro ante la propia “Verde” rumbo a Qatar 2022, donde la “Roja” sí mereció ganar. Ahora, la escasa puntería de la Selección no puede achacársele exclusivamente al “Tigre”, pues ya venían hilándose sequías históricas en los procesos recientes, aunque actualmente el problema se agudizó. Si no es por el discutido tanto que Carlos Lampe le regala a Eduardo Vargas, estaríamos hablando de ocho duelos oficiales sin convertir. Un entrenador nublado Gareca le había sacado el jugo a una selección peruana sin grandes nombres, por lo que asomaba como el DT ideal para una “Roja” que estaba en un proceso similar, ya sin las figuras de la “Generación Dorada”. Y si bien tuvo un arranque esperanzador en los amistosos, en los partidos oficiales ha tomado decisiones que denotan confusión. Contra Bolivia, el técnico planteó mal el encuentro desde el inicio, dejando fuera de la oncena estelar a uno que había sido de lo más rescatable en los tiempos recientes, Rodrigo Echeverría. Tuvo que corregir recién pasada la media hora con el ingreso de Vicente Pizarro, sacrificando a un Ben Brereton que estaba lejos de ser el peor de la cancha y ratificando que no lo tiene en buena consideración, vaya uno a saber por qué. En el complemento, el “Tigre” hizo entrar a un Gonzalo Tapia que, más allá de que respondió con personalidad, ni siquiera estaba entre los 26 citados originales. Ya las declaraciones del “Tigre” en la conferencia de prensa posterior, diciendo que le gustó el equipo y que se queda tranquilo por la actitud de sus dirigidos, reflejan un desconcierto y generan incredulidad. Un plantel sin jerarquía Puede sonar fuerte, pero la realidad lo ratifica, como el hecho de que por primera vez después de casi dos décadas, no habrá ningún chileno disputando la Champions League. Y eso que la “Orejona” de este año tiene más equipos, 36, pero así y todo no pudo entrar ningún futbolista nacional, con Darío Osorio quedándose a las puertas. Además, solamente quedan cinco jugadores criollos en los grandes torneos de Europa, más encima sin protagonismo. Alexis Sánchez está lesionado en el Udinese, donde Damián Pizarro ni asoma; Guillermo Maripán acaba de llegar al Torino; Brereton está hilando una racha histórica sin ganar en la Premier League, ahora en el Southampton; y Gabriel Suazo ha perdido terreno en el Toulouse. Entonces, hay que conformarse con seleccionados en ligas de segundo orden del “Viejo Continente”, como la rusa, la danesa o la Championship inglesa, o con todos los que hacen algo en Argentina, aparte de los infaltables “mexicanos” y uno que otro que milita en Brasil. Es más, en esta doble fecha Fifa, vieron acción cinco que se desempeñan en el desprestigiado fútbol chileno. Generaciones de “cristal” Con la “Generación Dorada” prácticamente fuera, los llamados a relevarla no han estado a la altura, empezando por algunos ya treintañeros como Diego Valdés, que cuando parecía afirmarse en la Selección, se ha lesionado una vez tras otra. Otro de la misma edad que asomaba como uno de los puntales del recambio, Paulo Díaz, no da pie con bola en la “Roja”, pese a que en River Plate destaca, mismo caso que Erick Pulgar en el Flamengo. Para más mala suerte, el joven que llegaba más encendido, Bruno Barticciotto, que tal vez podía ser una solución para el problema de finiquito, también quedó al margen por lesión. El otro que arribaba prendido era Osorio, pero cada vez que se ha puesto la camiseta del equipo nacional para un partido oficial, ha defraudado, con una falta de actitud desconcertante. Después están los casos de aquellos jugadores que se hacen expulsar o suspender por acumulación de tarjetas amarillas constantemente. Marcelino Núñez es uno de ellos y no termina de consolidarse en el combinado criollo, mientras que los mismos Díaz y Pulgar, además de Catalán, quedaron castigados para recibir a Brasil en octubre.
Desde hace 16 años, cuando Claudio Bravo asumió la capitanía de la selección chilena, la jineta pasó principalmente por su brazo y por los de Gary Medel, Arturo Vidal y Alexis Sánchez. Hoy, el arquero está retirado y el delantero está lesionado, mientras que el defensa y el volante no están por decisión técnica. PUBLICIDAD Más allá de quién porte el brazalete este jueves contra Argentina en Buenos Aires y el próximo martes frente a Bolivia en Santiago, hay varios jugadores que están llamados a comandar a la “Roja” ante la falta de los grandes referentes. Un grupo está compuesto por los bicampeones de América que van quedando, mientras que otro está integrado por un conjunto de treintañeros que hace rato tienen un lugar ganado en el plantel. También hay uno que no pertenece a ninguno de estos dos conjuntos, pero que es líder en su club. A continuación, un repaso a los que deben llevar la voz cantante dadas las ausencias de los “históricos”. El trío de los bicampeones En la actual nómina de Ricardo Gareca solamente hay tres jugadores que estuvieron presentes en los títulos de la Copa América del 2015 y del 2016. Uno de ellos es Mauricio Isla, el quinto futbolista con más partidos en la historia de la “Roja”, con 142, y otro es Eduardo Vargas, el séptimo en este apartado, con 112. Sin embargo, siempre han tenido un rol secundario en cuanto a los liderazgos del equipo y, de hecho, nunca han sido capitanes, como sí lo ha sido el tercero de este grupo, Eugenio Mena. El lateral izquierdo, que tiene 72 encuentros por la Selección y se ubica 14º en este registro, sabe lo que es portar la jineta. Lo hizo desde el primer minuto en junio del año pasado, en el amistoso ante Cuba, y también relevó a Gary Medel contra Túnez en la Copa Kirin del 2022, cuando el “Pitbull” fue reemplazado. En condiciones normales, el “Chueco” sería suplente de Gabriel Suazo, otro prospecto de líder futuro, pero este último está suspendido para la visita a Argentina. El “club de los 30″ Hay un conjunto de cuatro jugadores que tienen exactamente tres décadas de vida y que ya llevan un buen tiempo siendo recurrentes en el combinado nacional. Dos son los centrales, Paulo Díaz y Guillermo Maripán, quienes han sabido portar la jineta en equipos importantes, como River Plate y Mónaco, respectivamente. PUBLICIDAD Además, el zaguero del “Millonario” ha sido capitán dos veces en la Selección, ante Honduras en el 2019 y frente a Ghana en la Copa Kirin del 2022. Claudio Baeza, quien regresa a la “Roja” tras más de dos años de ausencia, también llevó el brazalete en dos ocasiones, contra México y El Salvador, en el 2021. Completa este grupo Erick Pulgar, el único, sacando a Isla, Vargas y Mena, que puede ufanarse de ser campeón de América, ya que estuvo en la Copa Centenario del 2016, aunque el antofagastino tiene un perfil bajo. El otro treintañero que estaba llamado a liderar, pero que quedó fuera por lesión, es Diego Valdés. Gabriel Arias Si bien disputa la titularidad mano a mano con Brayan Cortés, es un referente natural dada su edad, 36 años, la misma que Isla y Mena, siendo los más veteranos del actual plantel. En la Selección le ha tocado estar casi siempre en un segundo plano, pero igual ya tiene 17 partidos jugados, incluida toda la Copa América del 2019, donde la “Roja” logró el tercer puesto. Además, ante la lesión de Bravo, fue el arquero contra Canadá en el último encuentro, en desmedro de su colega de Colo Colo. Aparte, en Racing porta la jineta desde hace un buen tiempo.
La última vez que la selección chilena anotó en un partido oficial fue el 12 de octubre del 2023. Aquella noche, venció por 2-0 a Perú en el estadio Monumental por las Clasificatorias sudamericanas, con tantos de Diego Valdés y Marcelino Núñez. PUBLICIDAD Desde entonces, tanto con Eduardo Berizzo como con Ricardo Gareca en la banca, a la “Roja” se le extravió el gol en encuentros por los puntos. Si bien el cuadro al mando del “Tigre” parecía solucionar la falta de finiquito en los amistosos, en la Copa América reapareció esta falencia peor que nunca. El “Equipo de Todos” se despidió del torneo continental sin convertir, por lo que ya suma seis duelos oficiales sin marcar. Y si no lo hace este jueves ante Argentina en Buenos Aires o el próximo martes contra Bolivia en el Nacional, la sequía se extenderá por prácticamente un año, ya que la siguiente presentación será recibiendo a Brasil el 10 del mes que viene. Para acabar con esta mala racha, el combinado nacional no cuenta con su artillero histórico, Alexis Sánchez, ni tampoco con el quinto en este registro de todos los tiempos, Arturo Vidal. Sí tiene a disposición al segundo, Eduardo Vargas, uno de los siete delanteros de la actual nómina, cuyos números desde la eliminación a manos de Canadá, el 29 de junio, revisamos a continuación. Carlos Palacios Desde el empate ante Canadá que significó la eliminación de la “Roja” de la última Copa América, el jugador de Colo Colo es el que más ha convertido, con tres goles. Sin embargo, dos de esos tantos fueron de penal, contra Unión Española y Ñublense, por el Campeonato Nacional, mientras que el restante fue frente a Deportes Santa Cruz, por la Copa Chile. Por la Selección lleva siete partidos y 186 minutos, sin anotar todavía. Darío Osorio Buscará reivindicarse después de la Copa América, a la cual llegó como una de las cartas prometedoras y estuvo muy lejos del nivel que muestra constantemente en el Midtjylland. Luego del torneo continental marcó dos veces, ante el Santa Coloma, por la fase previa de la Champions League, y el domingo contra el Silkeborg, por la Superliga danesa. Por el “Equipo de Todos” suma 11 encuentros y 450 minutos, con un gol, el de marzo a Francia. Víctor Dávila Es otro que llegaba a la Copa América con el cartel de figura y tampoco pudo cortar la sequía anotadora de la Selección en partidos oficiales. De hecho, su falta de gol se ha extendido a su club, el Cska Moscú, donde no convierte desde el 25 de mayo. Es más, sus últimos tantos fueron en el amistoso de junio ante Paraguay, donde marcó dos de los tres que acumula en la “Roja”, en 14 encuentros y 792 minutos. PUBLICIDAD Ben Brereton No ha podido anotar desde su arribo al Southampton y, de hecho, su último gol fue el lejano 4 de mayo, por el Sheffield United. En la Copa América tampoco pudo refrendar los buenos números con los que llegaba desde su ex club. En la Selección también acumula una larga sequía, desde el triplete a República Dominicana en junio del 2023, cuando marcó tres de los siete tantos que lleva por la “Roja”, en 33 partidos y 1.918 minutos. Eduardo Vargas Parecía resucitar en la Selección de la mano de Gareca, pero tampoco pudo hacerse presente en el marcador en la Copa América. Después del torneo continental lleva un par de goles por el Atlético Mineiro, uno ante el Sao Paulo y el otro el pasado domingo contra el Gremio, ambos por el Brasileirao. Su último tanto por la “Roja” fue en el amistoso de junio frente a Paraguay, para llegar a 42 en 112 partidos y 8.211 minutos. Jean Meneses Acaba de debutar por el Vasco da Gama proveniente del Toluca, donde marcó sus dos goles más recientes el 19 de abril. A la Selección vuelve después de una larga ausencia, ya que no defiende la camiseta nacional desde hace dos años. Por la “Roja” acumula tres tantos, el último en septiembre del 2021 visitando a Colombia por las Eliminatorias, en un total de 23 partidos y 1.245 minutos. Bruno Barticciotto Pasa por un excelente momento en Talleres de Córdoba, aunque desde la eliminación de la “Roja” de la Copa América, a la cual no fue, lleva solamente dos goles. Fueron ante Instituto e Independiente Rivadavia, ambos durante agosto por el torneo argentino. Por la Selección suma dos tantos en apenas un partido, ya que anotó dos veces en los 90 minutos que disputó contra República Dominicana, en junio del año pasado. Thomas Galdames lidera a los no delanteros Dentro de los que no son atacantes, el defensa del Krylya Sovetov marcó un doblete hace un par de domingos en la Premier League rusa. Williams Alarcón anotó dos goles para Huracán, uno en julio y otro en agosto, mientras que Vicente Pizarro convirtió para Colo Colo ante O’Higgins, por la Copa Chile, y Junior, por la Libertadores. Paulo Díaz y Rodrigo Echeverría tienen un tanto para River Plate y el “Globo”, respectivamente.