Ricardo Gareca ha lamentado más de una vez que la selección chilena fue la más afectada por las lesiones dentro de Sudamérica. Tenga o no razón, lo cierto es que este problema terminó siendo una solución, ya que permitió el ingreso por primera vez como titular de Lucas Cepeda, quien fue la figura en el único triunfo oficial del 2024, el 4-2 del martes sobre Venezuela en el Estadio Nacional.
La “Roja” resucitó en las Clasificatorias sudamericanas rumbo al Mundial del 2024, a realizarse en Canadá, Estados Unidos y México. La victoria por 4-2 sobre Venezuela en el Estadio Nacional no solamente renovó las ilusiones, sino que también implicó desempolvar a una vieja y querida amiga del fútbol chileno: la calculadora.
Tras el empate 0-0 cosechado el viernes en Perú, la discusión respecto a la selección chilena ha estado centrada en las probabilidades que le quedan de ir al Mundial del 2026, a desarrollarse en Norteamérica. Sin embargo, para que se puedan seguir haciendo cálculos de acá a marzo, cuando se reanudarán las Clasificatorias sudamericanas, es una obligación vencer esta noche a Venezuela en el Estadio Nacional.
Hace bastante tiempo que la selección venezolana dejó de ser la “cenicienta” de Sudamérica. Si bien sigue siendo uno de los dos combinados del subcontinente que nunca han ganado la Copa América -junto a Ecuador- y el único que jamás ha clasificado a un Mundial, ahora parece decidido a acabar con su ausencia de torneos planetarios.
Ricardo Gareca no lo pasa para nada bien en Chile. Si bien el miércoles, en la conferencia de prensa previa al duelo de esta noche ante Perú en el Monumental de Lima, dijo sentirse “cómodo” en nuestro país, también reconoció que “no voy al estadio para no exponerme, mi presencia puede irritar”.
Ricardo Gareca ha lamentado más de una vez que la selección chilena fue la más afectada por las lesiones dentro de Sudamérica. Tenga o no razón, lo cierto es que este problema terminó siendo una solución, ya que permitió el ingreso por primera vez como titular de Lucas Cepeda, quien fue la figura en el único triunfo oficial del 2024, el 4-2 del martes sobre Venezuela en el Estadio Nacional.
La “Roja” resucitó en las Clasificatorias sudamericanas rumbo al Mundial del 2024, a realizarse en Canadá, Estados Unidos y México. La victoria por 4-2 sobre Venezuela en el Estadio Nacional no solamente renovó las ilusiones, sino que también implicó desempolvar a una vieja y querida amiga del fútbol chileno: la calculadora.
Tras el empate 0-0 cosechado el viernes en Perú, la discusión respecto a la selección chilena ha estado centrada en las probabilidades que le quedan de ir al Mundial del 2026, a desarrollarse en Norteamérica. Sin embargo, para que se puedan seguir haciendo cálculos de acá a marzo, cuando se reanudarán las Clasificatorias sudamericanas, es una obligación vencer esta noche a Venezuela en el Estadio Nacional.
Hace bastante tiempo que la selección venezolana dejó de ser la “cenicienta” de Sudamérica. Si bien sigue siendo uno de los dos combinados del subcontinente que nunca han ganado la Copa América -junto a Ecuador- y el único que jamás ha clasificado a un Mundial, ahora parece decidido a acabar con su ausencia de torneos planetarios.
Ricardo Gareca no lo pasa para nada bien en Chile. Si bien el miércoles, en la conferencia de prensa previa al duelo de esta noche ante Perú en el Monumental de Lima, dijo sentirse “cómodo” en nuestro país, también reconoció que “no voy al estadio para no exponerme, mi presencia puede irritar”.