La pérdida de la fuerza física, del deseo sexual e incluso de la capacidad de concentración son parte de los síntomas que indican que estamos envejeciendo y que la testosterona ha disminuido. La andropausia se define como la disminución lenta y gradual de la testosterona, lo que se traduce en cambios orgánicos y algunos emocionales. La pérdida de masa muscular, alteraciones del sueño, pérdida del vello genital, irritabilidad, manos y pies fríos, sudoración y estreñimiento son parte de los síntomas a los que hay que estar atentos llegada cierta edad. Cuando el hombre llega a los 40 y hasta los 55 años de edad, puede experimentar un fenómeno similar a la menopausia femenina, denominada andropausia. ¿QUÉ ES? La andropausia es el proceso natural, en el cual las capacidades sexuales del hombre disminuyen con la edad, igual que otras funciones orgánicas. ¿POR QUÉ SE PADECE? Esto se debe a los bajos niveles de testosterona en el organismo. Esta hormona masculina influye en muchas funciones físicas, actúa no solo en los órganos sexuales, también en los huesos, músculos, cerebro, piel y cabello. PRINCIPALES SECUELAS: Irritabilidad Insomnio Ansiedad Depresión Aumento de peso Disminución de la energía Disminución de la libido Disfunción eréctil
Según un estudio de la Universidad de Stanford (Estados Unidos), nuestro cuerpo empieza a envejecer a los 34 años, ya que una vez alcanzamos esta edad, se producen cambios en las proteínas relacionadas con el envejecimiento. Sabemos desde hace mucho tiempo que medir ciertas proteínas en la sangre puede brindar información sobre el estado de salud de una persona, por ejemplo, lipoproteínas para la salud cardiovascular, aseguró Tony Wyss-Coray, profesor de ciencias neurológicas y autor principal del estudio. Para determinar esta edad, el equipo analizó el plasma de 4.263 personas de entre 18 y 95 años, y gracias a sus evaluaciones fueron capaces de identificar un reloj fisiológico basado en 373 proteínas que es capaz de predecir la edad cronológica de una persona: «Las proteínas son los caballos de batalla de las células constituyentes del cuerpo, y cuando sus niveles relativos experimentan cambios sustanciales, significa que tú también has cambiado», explica Wyss-Coray. Tres edades de inflexión La investigación también revela que existen tres puntos de inflexión en el ciclo ligado al envejecimiento: Los 34, 60 y 78 años es donde se ven más cambios en la cantidad de proteínas transmitidas por la sangre. (AVV)
La pérdida de la fuerza física, del deseo sexual e incluso de la capacidad de concentración son parte de los síntomas que indican que estamos envejeciendo y que la testosterona ha disminuido. La andropausia se define como la disminución lenta y gradual de la testosterona, lo que se traduce en cambios orgánicos y algunos emocionales. La pérdida de masa muscular, alteraciones del sueño, pérdida del vello genital, irritabilidad, manos y pies fríos, sudoración y estreñimiento son parte de los síntomas a los que hay que estar atentos llegada cierta edad. Cuando el hombre llega a los 40 y hasta los 55 años de edad, puede experimentar un fenómeno similar a la menopausia femenina, denominada andropausia. ¿QUÉ ES? La andropausia es el proceso natural, en el cual las capacidades sexuales del hombre disminuyen con la edad, igual que otras funciones orgánicas. ¿POR QUÉ SE PADECE? Esto se debe a los bajos niveles de testosterona en el organismo. Esta hormona masculina influye en muchas funciones físicas, actúa no solo en los órganos sexuales, también en los huesos, músculos, cerebro, piel y cabello. PRINCIPALES SECUELAS: Irritabilidad Insomnio Ansiedad Depresión Aumento de peso Disminución de la energía Disminución de la libido Disfunción eréctil
Según un estudio de la Universidad de Stanford (Estados Unidos), nuestro cuerpo empieza a envejecer a los 34 años, ya que una vez alcanzamos esta edad, se producen cambios en las proteínas relacionadas con el envejecimiento. Sabemos desde hace mucho tiempo que medir ciertas proteínas en la sangre puede brindar información sobre el estado de salud de una persona, por ejemplo, lipoproteínas para la salud cardiovascular, aseguró Tony Wyss-Coray, profesor de ciencias neurológicas y autor principal del estudio. Para determinar esta edad, el equipo analizó el plasma de 4.263 personas de entre 18 y 95 años, y gracias a sus evaluaciones fueron capaces de identificar un reloj fisiológico basado en 373 proteínas que es capaz de predecir la edad cronológica de una persona: «Las proteínas son los caballos de batalla de las células constituyentes del cuerpo, y cuando sus niveles relativos experimentan cambios sustanciales, significa que tú también has cambiado», explica Wyss-Coray. Tres edades de inflexión La investigación también revela que existen tres puntos de inflexión en el ciclo ligado al envejecimiento: Los 34, 60 y 78 años es donde se ven más cambios en la cantidad de proteínas transmitidas por la sangre. (AVV)