El ministro de Justicia, Jaime Gajardo, negó que el exsubsecretario del Interior, Manuel Monsalve, enfrente riesgos de seguridad en la cárcel de Rancagua, donde fue trasladado tras ser acusado de delitos de abuso sexual, violación y violación tentada contra una funcionaria de Gobierno. Gremios de Gendarmería, como la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios (Anfup), advirtieron sobre posibles vulnerabilidades en el recinto penitenciario, citando un reciente intento de fuga y cuestionando la seguridad del establecimiento. Fuimos vulnerados por una cuchara, expresó el suboficial mayor César Guzmán en referencia al incidente. Sin embargo, el ministro Gajardo desestimó estas preocupaciones, afirmando que el informe técnico de Gendarmería avaló el traslado de Monsalve al módulo 86, un área destinada a imputados primerizos por delitos sexuales.Cada módulo está completamente aislado, lo que garantiza que no haya contacto entre reclusos de máxima seguridad y aquellos en el módulo donde está Monsalve, explicó. Finalmente, en el módulo 86, donde conviven cerca de 70 internos, Monsalve comparte celda con el exalcalde de Rancagua, Juan Ramón Godoy, y un excarabinero. Este sector alberga principalmente a exfuncionarios públicos y policiales, reforzando las condiciones de seguridad para los internos.
El suboficial mayor de Gendarmería y dirigente de la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios (Anfup), César Guzmán, expresó su preocupación por el traslado de Manuel Monsalve a la cárcel de Rancagua, donde, según el dirigente, existen serios riesgos de seguridad para el exsubsecretario del Interior. Monsalve, quien enfrenta acusaciones por abuso sexual, violación y violación tentativa en contra de una funcionaria del Gobierno, fue derivado al módulo 86 de este recinto, destinado a imputados primerizos por delitos sexuales. Ante esto, Guzmán detalló que el módulo, que alberga alrededor de 70 reclusos, incluye a algunos internos vinculados al crimen organizado, además de figuras de relevancia como el exalcalde de Rancagua, Juan Ramón Godoy. El dirigente denunció deficiencias en la mantención de la cárcel, a cargo de la empresa Siges, y señaló que recientemente se produjo un evento de fuga, donde un recluso logró escapar tras abrir su celda con una cuchara, lo que subraya la vulnerabilidad de la instalación. Cuando nos hablan de la cárcel de Rancagua como una prisión de alta seguridad, debemos recordar que la semana pasada fuimos vulnerados por una cuchara, afirmó Guzmán. Además, destacó que, debido a la presencia de internos vinculados al crimen organizado, Monsalve podría estar en peligro.No tenemos el personal adecuado para custodiarlo de forma directa, señaló, y enfatizó la carencia de recursos humanos para brindar una seguridad efectiva. Finalmente, el dirigente reiteró sus críticas hacia las condiciones del centro penitenciario, advirtiendo que cualquier intento de agresión contra Monsalve sería difícil de prevenir sin el personal necesario para ofrecer protección personalizada.
El ministro de Justicia, Jaime Gajardo, negó que el exsubsecretario del Interior, Manuel Monsalve, enfrente riesgos de seguridad en la cárcel de Rancagua, donde fue trasladado tras ser acusado de delitos de abuso sexual, violación y violación tentada contra una funcionaria de Gobierno. Gremios de Gendarmería, como la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios (Anfup), advirtieron sobre posibles vulnerabilidades en el recinto penitenciario, citando un reciente intento de fuga y cuestionando la seguridad del establecimiento. Fuimos vulnerados por una cuchara, expresó el suboficial mayor César Guzmán en referencia al incidente. Sin embargo, el ministro Gajardo desestimó estas preocupaciones, afirmando que el informe técnico de Gendarmería avaló el traslado de Monsalve al módulo 86, un área destinada a imputados primerizos por delitos sexuales.Cada módulo está completamente aislado, lo que garantiza que no haya contacto entre reclusos de máxima seguridad y aquellos en el módulo donde está Monsalve, explicó. Finalmente, en el módulo 86, donde conviven cerca de 70 internos, Monsalve comparte celda con el exalcalde de Rancagua, Juan Ramón Godoy, y un excarabinero. Este sector alberga principalmente a exfuncionarios públicos y policiales, reforzando las condiciones de seguridad para los internos.
El suboficial mayor de Gendarmería y dirigente de la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios (Anfup), César Guzmán, expresó su preocupación por el traslado de Manuel Monsalve a la cárcel de Rancagua, donde, según el dirigente, existen serios riesgos de seguridad para el exsubsecretario del Interior. Monsalve, quien enfrenta acusaciones por abuso sexual, violación y violación tentativa en contra de una funcionaria del Gobierno, fue derivado al módulo 86 de este recinto, destinado a imputados primerizos por delitos sexuales. Ante esto, Guzmán detalló que el módulo, que alberga alrededor de 70 reclusos, incluye a algunos internos vinculados al crimen organizado, además de figuras de relevancia como el exalcalde de Rancagua, Juan Ramón Godoy. El dirigente denunció deficiencias en la mantención de la cárcel, a cargo de la empresa Siges, y señaló que recientemente se produjo un evento de fuga, donde un recluso logró escapar tras abrir su celda con una cuchara, lo que subraya la vulnerabilidad de la instalación. Cuando nos hablan de la cárcel de Rancagua como una prisión de alta seguridad, debemos recordar que la semana pasada fuimos vulnerados por una cuchara, afirmó Guzmán. Además, destacó que, debido a la presencia de internos vinculados al crimen organizado, Monsalve podría estar en peligro.No tenemos el personal adecuado para custodiarlo de forma directa, señaló, y enfatizó la carencia de recursos humanos para brindar una seguridad efectiva. Finalmente, el dirigente reiteró sus críticas hacia las condiciones del centro penitenciario, advirtiendo que cualquier intento de agresión contra Monsalve sería difícil de prevenir sin el personal necesario para ofrecer protección personalizada.