La exfigura del recordado programa juvenil Yingo, Jocelyn Medina , vive uno de los momentos más tristes de su vida tras el fallecimiento de su pareja, Michael Grez, a tan solo un mes de llegar al altar. La pareja había mantenido en secreto los preparativos de su boda, que prometía ser un sueño hecho realidad. A través de sus redes sociales, Jocelyn compartió un mensaje desgarrador, en el que expresó su profundo dolor y recordó con amor los planes y momentos que construyeron juntos. “Nunca pensé escribir estas palabras, menos a un mes de casarnos. Felices preparando en secreto nuestra hermosa boda, tal como la imaginamos y diseñábamos día a día”, comenzó relatando. La inesperada partida de Grez dejó un vacío irreparable en la vida de Medina, quien no escondió su devastación. “Mi amor, estoy destrozada. Jamás imaginé que partieras antes. Siempre dijimos que nos iríamos juntos, que llegaríamos hasta viejitos”, expresó. En sus palabras, Jocelyn destacó el amor único que compartían, describiendo a Grez como su alegría diaria. “Despertar cada mañana a tu lado era abrir los ojos en el paraíso, siempre con una linda sonrisa para mí. Y nuestras largas noches, todos los días un viernes”, escribió. Pese a la inmensa tristeza, la exfigura juvenil mostró fortaleza al dedicarle un mensaje de despedida lleno de esperanza. “Quiero que vueles alto, mi vida; eres luz y amor. Espérame que aún tengo cosas que hacer en esta tierra y volaré a tus brazos para que nos amemos en la eternidad”, dijo, transmitiendo el deseo de reencontrarse algún día. En su emotivo cierre, Jocelyn pidió a su pareja que la guíe desde el cielo. “Mis hijos me necesitan. Sé mi ángel; mi luz en el cielo; tal como lo fuiste en la tierra. Te amo eternamente”, concluyó,reafirmando la profunda conexiónque seguirá viva más allá del tiempo y ladistancia. Fuente: Publimetro
A lo largo de los tiempos y de las distintas civilizaciones, esta unión matrimonial se realizó con diferentes ceremonias según las religiones, sociedades, culturas y realidades económicas que signaran a los novios y a sus familias. Así, existen bodas más sencillas, otras más complejas, unas más humildes y otras más ostentosas. En el caso de este último tipo de casamientos, los que no reparan en gastos, hay uno que bate todas las marcas posibles. Se trata de una fastuosa celebración de la unión de una pareja india realizada en París, en el año 2004, cuyo presupuesto total fue tan elevado que llegó a ingresar al Libro Guinness de los Récords en el ítem de la boda más cara de la historia. Es que todo lo que pasó antes, durante y después de que estos novios dieran el sí, incluyendo invitados, locaciones, menús y una serie de festejos que duraron una semana, salió la friolera suma de 55 millones de dólares, de acuerdo al mencionado Libro Guinness. Los protagonistas de la onerosa celebración fueron Vanisha Mittal y Amit Bhatia. Ella es hija de Lakshmi Mittal, un magnate indio de la industria del acero y una de las personas más ricas del mundo; mientras que él es un banquero e inversionista de origen indio nacido en Gran Bretaña, quien tampoco anda escaso de fondos. Pero para llegar a entender cómo es que se puede gastar tanto dinero en una boda, acá van algunas de las características de esta celebración que explican el exorbitante presupuesto, imposible de alcanzar para la mayoría de los mortales, quien al proyectar una fiesta de matrimonio evalúan hasta el costo del más modesto canapé. Más de mil invitados y seis días de festejos A la boda fueron invitadas más de mil personas de diversas partes del planeta, a quienes se les envió una invitación con veinte hojas de plata, se les pagó el pasaje -incluso vuelos en jets privados -, y se los hospedó, con todos los gastos pagos, en hoteles cinco estrellas de la Ciudad Luz. Y este trato preferencial para los asistentes al casamiento de Vanisha y Amit no fue solo por una noche. No. La celebración duró un total de seis días, a mediados de junio de 2004, con todo tipo de fiestas lujosas, platos opíparos de los mejores chefs, bebidas de lujo ( solo en vino se gastaron 1,5 millones de dólares) y una interminable sucesión de espectáculos. En todo ese tiempo, y en todas las diversiones que la boda brindó, ninguno de los invitados tuvo que sacar un solo dólar de su bolsillo. Una muestra de la magnitud que tuvo esta unión matrimonial se puede entrever con solo mencionar que la ceremonia nupcial y el banquete posterior se realizaron en el Palacio de Versalles, ubicado a unos 20 kilómetros de París: un escenario que fue residencia del rey Luis XIV y que no suele estar abierto para eventos privados. Además, otra parte del festejo tuvo lugar en el impactante Jardín de las Tullerías parisino. Para terminar de combinar esta inolvidable celebración con los lugares más emblemáticos de la capital francesa, también se brindó un show de fuegos artificiales en honor a los novios nada menos que en los jardines de la Torre Eiffell. Además de todo eso, por los distintos shows que se llevaron adelante en los seis días de la celebración de Vanisha y Amit desfilaron figuras internacionales. Así, por ejemplo, la cantante australiana Kylie Minogue dio un recital durante una media hora ante los felices novios y el millar de invitados; por su actuación, le habrían pagado unos 300.000 dólares. También formó parte de los festejos Shah Rukh Khan. Este hombre -poco conocido por estas latitudes- es una megaestrella absoluta de la India, a tal punto que esta celebridad de la televisión y del cine de aquel país es conocida como el Badsha (Gran Rey) de Bollywood. De hecho, gran parte del look de los invitados y los novios se relacionó con lo que puede verse en la meca del cine indio: sedas y saris, colores estridentes y mucho brillo. También se contrató a un prestigioso guionista de Hollywood para que escribiera una representación de los orígenes de la relación entre Amit y Vanisha. Estos papeles fueron interpretados por el magnate padre de la novia y su esposa. En fin. En la boda más cara de la historia -de acuerdo con el Guinness de los récords- aparentemente no faltó nada. Otras publicaciones como Time señalan, incluso, que el costo total de la ceremonia y los festejos pudo ser mayor a la enunciada por el legendario libro de mejores marcas: se habla de entre 60 y 78 millones de dólares.
La exfigura del recordado programa juvenil Yingo, Jocelyn Medina , vive uno de los momentos más tristes de su vida tras el fallecimiento de su pareja, Michael Grez, a tan solo un mes de llegar al altar. La pareja había mantenido en secreto los preparativos de su boda, que prometía ser un sueño hecho realidad. A través de sus redes sociales, Jocelyn compartió un mensaje desgarrador, en el que expresó su profundo dolor y recordó con amor los planes y momentos que construyeron juntos. “Nunca pensé escribir estas palabras, menos a un mes de casarnos. Felices preparando en secreto nuestra hermosa boda, tal como la imaginamos y diseñábamos día a día”, comenzó relatando. La inesperada partida de Grez dejó un vacío irreparable en la vida de Medina, quien no escondió su devastación. “Mi amor, estoy destrozada. Jamás imaginé que partieras antes. Siempre dijimos que nos iríamos juntos, que llegaríamos hasta viejitos”, expresó. En sus palabras, Jocelyn destacó el amor único que compartían, describiendo a Grez como su alegría diaria. “Despertar cada mañana a tu lado era abrir los ojos en el paraíso, siempre con una linda sonrisa para mí. Y nuestras largas noches, todos los días un viernes”, escribió. Pese a la inmensa tristeza, la exfigura juvenil mostró fortaleza al dedicarle un mensaje de despedida lleno de esperanza. “Quiero que vueles alto, mi vida; eres luz y amor. Espérame que aún tengo cosas que hacer en esta tierra y volaré a tus brazos para que nos amemos en la eternidad”, dijo, transmitiendo el deseo de reencontrarse algún día. En su emotivo cierre, Jocelyn pidió a su pareja que la guíe desde el cielo. “Mis hijos me necesitan. Sé mi ángel; mi luz en el cielo; tal como lo fuiste en la tierra. Te amo eternamente”, concluyó,reafirmando la profunda conexiónque seguirá viva más allá del tiempo y ladistancia. Fuente: Publimetro
A lo largo de los tiempos y de las distintas civilizaciones, esta unión matrimonial se realizó con diferentes ceremonias según las religiones, sociedades, culturas y realidades económicas que signaran a los novios y a sus familias. Así, existen bodas más sencillas, otras más complejas, unas más humildes y otras más ostentosas. En el caso de este último tipo de casamientos, los que no reparan en gastos, hay uno que bate todas las marcas posibles. Se trata de una fastuosa celebración de la unión de una pareja india realizada en París, en el año 2004, cuyo presupuesto total fue tan elevado que llegó a ingresar al Libro Guinness de los Récords en el ítem de la boda más cara de la historia. Es que todo lo que pasó antes, durante y después de que estos novios dieran el sí, incluyendo invitados, locaciones, menús y una serie de festejos que duraron una semana, salió la friolera suma de 55 millones de dólares, de acuerdo al mencionado Libro Guinness. Los protagonistas de la onerosa celebración fueron Vanisha Mittal y Amit Bhatia. Ella es hija de Lakshmi Mittal, un magnate indio de la industria del acero y una de las personas más ricas del mundo; mientras que él es un banquero e inversionista de origen indio nacido en Gran Bretaña, quien tampoco anda escaso de fondos. Pero para llegar a entender cómo es que se puede gastar tanto dinero en una boda, acá van algunas de las características de esta celebración que explican el exorbitante presupuesto, imposible de alcanzar para la mayoría de los mortales, quien al proyectar una fiesta de matrimonio evalúan hasta el costo del más modesto canapé. Más de mil invitados y seis días de festejos A la boda fueron invitadas más de mil personas de diversas partes del planeta, a quienes se les envió una invitación con veinte hojas de plata, se les pagó el pasaje -incluso vuelos en jets privados -, y se los hospedó, con todos los gastos pagos, en hoteles cinco estrellas de la Ciudad Luz. Y este trato preferencial para los asistentes al casamiento de Vanisha y Amit no fue solo por una noche. No. La celebración duró un total de seis días, a mediados de junio de 2004, con todo tipo de fiestas lujosas, platos opíparos de los mejores chefs, bebidas de lujo ( solo en vino se gastaron 1,5 millones de dólares) y una interminable sucesión de espectáculos. En todo ese tiempo, y en todas las diversiones que la boda brindó, ninguno de los invitados tuvo que sacar un solo dólar de su bolsillo. Una muestra de la magnitud que tuvo esta unión matrimonial se puede entrever con solo mencionar que la ceremonia nupcial y el banquete posterior se realizaron en el Palacio de Versalles, ubicado a unos 20 kilómetros de París: un escenario que fue residencia del rey Luis XIV y que no suele estar abierto para eventos privados. Además, otra parte del festejo tuvo lugar en el impactante Jardín de las Tullerías parisino. Para terminar de combinar esta inolvidable celebración con los lugares más emblemáticos de la capital francesa, también se brindó un show de fuegos artificiales en honor a los novios nada menos que en los jardines de la Torre Eiffell. Además de todo eso, por los distintos shows que se llevaron adelante en los seis días de la celebración de Vanisha y Amit desfilaron figuras internacionales. Así, por ejemplo, la cantante australiana Kylie Minogue dio un recital durante una media hora ante los felices novios y el millar de invitados; por su actuación, le habrían pagado unos 300.000 dólares. También formó parte de los festejos Shah Rukh Khan. Este hombre -poco conocido por estas latitudes- es una megaestrella absoluta de la India, a tal punto que esta celebridad de la televisión y del cine de aquel país es conocida como el Badsha (Gran Rey) de Bollywood. De hecho, gran parte del look de los invitados y los novios se relacionó con lo que puede verse en la meca del cine indio: sedas y saris, colores estridentes y mucho brillo. También se contrató a un prestigioso guionista de Hollywood para que escribiera una representación de los orígenes de la relación entre Amit y Vanisha. Estos papeles fueron interpretados por el magnate padre de la novia y su esposa. En fin. En la boda más cara de la historia -de acuerdo con el Guinness de los récords- aparentemente no faltó nada. Otras publicaciones como Time señalan, incluso, que el costo total de la ceremonia y los festejos pudo ser mayor a la enunciada por el legendario libro de mejores marcas: se habla de entre 60 y 78 millones de dólares.