La Real Academia Sueca de Ciencias anunció este lunes su último Premio Nobel del periodo de 2024, que correspondió a las Ciencias Económicas, y que este año recayó en los investigadores estadounidenses Daron Acemolgu (de origen turco) y Simon Johnson, y el británico James Robinson. PUBLICIDAD El aporte de los tres economistas en materia de desigualdad entre naciones más prósperas y otras de escaso crecimiento económico fue el principal argumento que tomó el Comité del Nobel para galardonar a los investigadores, quienes han realizado una serie de “estudios sobre cómo se forman las instituciones y cómo afectan a la prosperidad”. El último Premio Nobel de 2024 La academia europea destacó en sus redes sociales oficiales que “el 20% de los países más ricos del mundo son 30 veces más ricos que el 20% más pobre. La brecha de ingresos entre los más ricos y los más pobres también es persistente; aunque los países pobres han ganado en riqueza, no están alcanzando a los más prósperos”. En ese escenario, han valorado que los trabajos de Acemoglu, Johnson y Robinson “han demostrado la importancia que tienen las instituciones sociales para la prosperidad de un país. Las sociedades con un estado de derecho deficiente e instituciones que explotan a la población no generan crecimiento ni cambios para mejor. La investigación de los galardonados nos ayuda a entender por qué”. “Han aportado con nuevas ideas para comprender desde de las ciencias políticas por qué existen diferencias tan grandes en la prosperidad entre las naciones”, agregaron. “Sus trabajos han tenido una influencia decisiva en la investigación continua tanto en economía como en ciencias políticas. Y sus ideas sobre cómo las instituciones influyen en la prosperidad muestran que el trabajo para apoyar a la democracia y a las instituciones inclusivas es una forma importante de avanzar en la promoción del desarrollo económico”, finalizaron.
La organización humanitaria japonesa Nihon Hidankyo fue ungida este viernes por el Comité Noruego del Nobel como la acreedora del premio de la paz 2024 debido, principalmente, a sus denodados esfuerzos de décadas por instaurar “un veto” al uso de armas nucleares de exterminio humano. PUBLICIDAD Frente a las últimas señales que se han dado en el planeta por los conflictos bélicos desatados en diversos territorios, y la decisión de las grandes potencias nucleares de ampliar y mejorar sus arsenales químicos, fue que la organización del Premio Nobel decidió galardonar a este movimiento nipón que surgió en 1956 como consecuencia de los ataques con bombas nucleares a las ciudades de Hiroshima y Nagasaki en el fin de la Segunda Guerra Mundial. Un Premio Nobel para testimoniar los efectos nocivos de las armas nucleares “El Comité Noruego del Nobel ha querido reconocer un hecho alentador al conceder el Premio Nobel de la Paz de este año a Nihon Hidankyo: en casi 80 años no se ha utilizado ningún arma nuclear en una guerra. Los extraordinarios esfuerzos de Nihon Hidankyo y otros representantes de los Hibakusha han contribuido en gran medida a la instauración del veto nuclear. Por ello, es alarmante que hoy en día este tabú contra el uso de armas nucleares se encuentre bajo presión”, argumentaron desde la Fundación Nobel. El reconocimiento a la labor de contención y visualización de los nocivos efectos que las armas nucleares han tenido en las víctimas del ataque a suelo nipón por parte de esta organización fueron destacados no sólo por parte del Comité del Nobel, sino que por otras autoridades políticas mundiales, como el caso de la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen. “Han demostrado, mediante testimonios, que las armas nucleares no deben volver a utilizarse nunca más”, puntualizó Watne Frydnes, presidente del Comité Nobel noruego. En sintonía con sus dichos, las redes sociales del Nobel, expusieron además que este galardón llega a un año de cumplirse ocho décadas “desde que dos bombas atómicas estadounidenses mataron a unos 120 mil habitantes de Hiroshima y Nagasaki. Un número similar murió por quemaduras y lesiones por radiación en los meses y años siguientes”. “Las armas nucleares de hoy tienen un poder destructivo mucho mayor. Pueden matar a millones de personas y afectarían catastróficamente al clima. Una guerra nuclear podría destruir nuestra civilización”, reflexionaron. “Este premio a Nihon Hidankyo reconoce sus esfuerzos para lograr un mundo libre de armas nucleares y por demostrar, a través del testimonio de testigos, que las armas nucleares nunca deben volver a usarse”, finalizaron.
Este jueves el Comité del Nobel dio a conocer en Suecia el nombre de la acreedora del premio de literatura de este año, y que recayó en la escritora y poetisa surcoreana Han Kang. PUBLICIDAD Nacida en 1970, en la ciudad de Gwangju, Kang siempre estuvo destinada a darle forma a su talento en el mundo de las letras, considerando que su padre fue un reputado novelista, y su entorno en completa sincronización con variadas expresiones artísticas que le permitieron a la autora aventurarse no sólo en la literatura, sino que en la música y el arte en general. Premio Nobel al talento en prosa de autora surcoreana En su juventud, entre los 22 y 23 años (1993), la escritora dio sus primeros pasos en las letras gracias a una serie de incipientes ensayos (“El ancla escarlata”) y poemas que logró publicar en la revista surcoreana “Literatura y sociedad”. Un primer escalón para que dos años después se lanzara al mundo de la prosa con su colección de cuentos titulada “El amor de Yeosu”. Como profesional de las letras (titulada de la Universidad Yonsei), Kang también conoció del trabajo periodístico en sus primeros años, donde se desempeñó por tres años en revistas como “Publishing Journal” y “Samtoh”. Influida por una adolescencia compleja, que vivió en Seúl (donde se trasladó junto a su familia a los 11 años), y que estuvo llena de cuestionamientos respecto de la cotidianidad humana, los cuales finalmente decantaron en un destacable estilo en prosa que consolidó en sus posteriores obras. .Una de las más destacadas, según reseñaron en las redes sociales del Premio Nobel, la novela que publicó en 2002 “Tus manos frías”, que en palabras del comité “muestra claramente el interés de Kang por el arte”. Opens in new window El Comité del Premio Nobel galardonó a la escritora surcoreana Han Kang como la mejor literata de 2024. Fuente: Instagram @nobelprize_org. Ese talento en su trabajo fue el que acabó consolidando su figura a nivel mundial en 2007 gracias al lanzamiento de la novela “La vegetariana”, una suma de tres cuentos relacionados, en los que Kang se habría inspirado en un verso de Yi Sang donde postulaba que “creo que las personas han de ser plantas”. PUBLICIDAD “La obra de la autora retrata las violentas consecuencias que se producen cuando su protagonista Yeong-hye se niega a someterse a las normas de la ingesta de alimentos”, agrega el comité del Nobel, que destaca finalmente el afán de Kang por exponer en sus obras “una doble exposición al dolor, una correspondencia entre el tormento mental y el físico con estrechas conexiones con el pensamiento oriental”. Calificación que Kang ha corroborado con relatos que reflejan la fragilidad de la vida humana frente a traumas históricos y el conjunto casi invisible de reglas que estructuran finalmente el comportamiento deseado del ser humano.
Los profesores John Hopfield (91) y Geoffrey Hinton (76) han sido galardonados este martes por la Real Academia Sueca de las Ciencias por sus descubrimientos e invenciones” que han sido “fundamentales para el aprendizaje automático con redes neuronales artificiales, declaró el jurado. El nombre de los premiados fue leído por Hans Ellegren, secretario general de la organización que otorga los premios científicos más importante del mundo, desde Estocolmo (Suecia). Hopfield es profesor en la Universidad de Princeton (Estados Unidos), mientras que Hinton da clases en la Universidad de Toronto (Canadá). Estoy estupefacto. No tenía idea de que esto sucedería, declaró Hinton, a quien se ha apodado como “el padrino” de la inteligencia artificial. Las bases de la IA “El premio de este año es sobre máquinas que aprenden”, anunció el secretario general de la Academia sueca. Hopfield creó una memoria asociativa en 1982, la cual podía almacenar y reconstruir imágenes y otros tipos de patrones en los datos. Hinton, por su parte, desarrolló un método que permite a una máquina encontrar propiedades en los datos de forma autónoma y, por lo tanto, realizar tareas como identificar elementos específicos en imágenes. El trabajo de los científicos ha servido para que las computadoras sean capaces de imitar funciones humanas como la memoria y el aprendizaje. ¿Cómo? Utilizando conceptos y métodos fundamentales de la física, los científicos desarrollaron tecnologías que utilizan estructuras en redes para procesar información. Algunas de esas estructuras ya se utilizan a diario. El aprendizaje es una capacidad fascinante del cerebro humano, afirmó Ellen Moons, presidenta del Comité Nobel de Física, luego de leídos los nombre de los laureados. Nosotros podemos reconocer imágenes y asociarlas con memorias y experiencias pasadas. Billones de neuronas que están conectadas entre sí nos dan una capacidad cognitiva única, apuntó la miembro del jurado, quien indicó que las redes neuronales artificiales (desarrolladas por los premiados) están inspiradas en las redes neuronales de nuestro cerebro. Moons aseguró que el trabajo de los premiados no solo ha permitido avances en la astrofísica o el estudio de las partículas, sino que ya es nuestra vida cotidiana, a través de tecnologías comoel reconocimiento facial y la traducción de lenguajes. Avance con luces y sombras La presidenta del Comité Nobel de Física aseguró que los estudios de Hopfield y Hinton pueden ayudar a los seres humanos a tomar decisiones más rápidas y confiables a la hora de diagnosticar enfermedades. Sin embargo, también admitió que abren las puertas a situaciones peligrosas y riesgosas. Esto ya fue advertido por el propio Hinton, quien en 2023 renunció a su puesto como asesor de Google alertando sobre los riesgos que implicaba el rápido desarrollo de la inteligencia artificial. Nada más conocer sobre la concesión del premio a su persona, el profesor británico-canadinense insistió en sus llamados de atención. No tenemos experiencia sobre lo que es tener cosas más inteligentes que nosotros, declaró Hinton por teléfono en la conferencia de prensa del Nobel. Va a ser maravilloso en muchos aspectos, en áreas como la atención médica, aseveró, pero acto seguido indicó que también tenemos que preocuparnos por una serie de posibles consecuencias negativas. En particular, la amenaza de que estas cosas se salgan de control. En una entrevista a la BBC, el ahora premiado realizó un aterrador pronóstico que parece salido del guión de una película de Hollywood. Mi suposición es que, dentro de cinco o 20 años, habrá una probabilidad del 50% de que tengamos que afrontar el problema de que la inteligencia artificial intente tomar el control de nuestras vidas, dijo. Hinton cree que la humanidad podría tener que enfrentar en un futuro cercano un dilema parecido al de la película Terminator, donde las máquinas se alzan contra los humanos. Haciendo memoria Considerado ampliamente como el premio más prestigioso del mundo para los físicos, el reconocimiento fue creado, junto con los galardones por logros en medicina, literatura y paz, en el testamento de Alfred Nobel. Desde 1901 se han concedido 117 veces y en la lista de ganadores anteriores figuran superestrellas científicas como Albert Einstein, Niels Bohr y Enrico Fermi. El año pasado, tres investigadores ganaron el premio por sus avances en el campo del estudio de los electrones. El premio fue para la física franco-sueca Anne L’Huillier, el científico francés Pierre Agostini y el húngaro Ferenc Krausz, quienes utilizaron destellos de luz de una duración de attosegundos (un billonésimo de segundo) para iluminar moléculas y proporcionar breves visiones de cómo viajan los electrones a gran velocidad. El australiano William Lawrence Bragg el honrado más joven -con 25 años- por sus trabajos en “el análisis de la estructura cristalina mediante rayos X”. Por su parte, el científico con mayor fue Arthur Ashkin, quien en 2018 recibió el premio a sus 96 años “por las pinzas ópticas y su aplicación a los sistemas biológicos”.
Los científicos estadounidenses David Baker y John Jumper, y británico Demis Hassabis fueron galardonados este miércoles con el Premio Nobel de Química 2024 gracias a sus investigaciones respecto de la predicción de la estructura de las proteínas mediante la inteligencia artificial. PUBLICIDAD En el caso de Baker, debido a su trabajo en el diseño computacional de proteínas; y en el de Hassabis y Jumper por la predicción de la estructura de las proteínas, según informó esta mañana el comité del Nobel. Los nuevos ganadores del Premio Nobel El presidente del comité, Heiner Linke, afirmó que este premio honraba la investigación que estos científicos lideraron respecto de las conexiones entre la secuencia de aminoácidos y la estructura de proteínas. “De hecho, durante décadas se le ha llamado el gran reto de la química y, en particular, de la bioquímica. Por eso hoy se premia ese gran avance”, afirmó Linke. El anuncio fue publicado tanto en la cuenta oficial del Nobel en Instagram como en su canal de YouTube, donde se expuso que este galardón “tiene que ver con las proteínas, las ingeniosas herramientas químicas de la vida”. “David Baker ha logrado la hazaña casi imposible de construir tipos de proteínas completamente nuevos. Demis Hassabis y John Jumper han desarrollado un modelo de IA para resolver un problema de 50 años: predecir las estructuras complejas de las proteínas. Estos descubrimientos tienen un potencial enorme”, agregaron. “La diversidad de la vida da testimonio de la asombrosa capacidad de las proteínas como herramientas químicas. Controlan e impulsan todas las reacciones químicas que juntas son la base de la vida. Las proteínas también funcionan como hormonas, sustancias señalizadoras, anticuerpos y los componentes básicos de diferentes tejidos”, explicaron. PUBLICIDAD Opens in new window Este miércoles se conocieron los ganadores del Premio Nobel de Química 2024. Fuente: Instagram @nobelprize_org. “La vida no podría existir sin las proteínas. El hecho de que ahora podamos predecir las estructuras de las proteínas y diseñar nuestras propias proteínas confiere el mayor beneficio a la humanidad”, aseguraron. Cabe señalar que los científicos Hassabis y Jumper trabajan en el Google Deepmind de Londres, Inglaterra; mientras que Baker realiza sus investigaciones bajo el alero de la Universidad de Washington, en Seattle, Estados Unidos.
La Real Academia Sueca de Ciencias anunció este lunes su último Premio Nobel del periodo de 2024, que correspondió a las Ciencias Económicas, y que este año recayó en los investigadores estadounidenses Daron Acemolgu (de origen turco) y Simon Johnson, y el británico James Robinson. PUBLICIDAD El aporte de los tres economistas en materia de desigualdad entre naciones más prósperas y otras de escaso crecimiento económico fue el principal argumento que tomó el Comité del Nobel para galardonar a los investigadores, quienes han realizado una serie de “estudios sobre cómo se forman las instituciones y cómo afectan a la prosperidad”. El último Premio Nobel de 2024 La academia europea destacó en sus redes sociales oficiales que “el 20% de los países más ricos del mundo son 30 veces más ricos que el 20% más pobre. La brecha de ingresos entre los más ricos y los más pobres también es persistente; aunque los países pobres han ganado en riqueza, no están alcanzando a los más prósperos”. En ese escenario, han valorado que los trabajos de Acemoglu, Johnson y Robinson “han demostrado la importancia que tienen las instituciones sociales para la prosperidad de un país. Las sociedades con un estado de derecho deficiente e instituciones que explotan a la población no generan crecimiento ni cambios para mejor. La investigación de los galardonados nos ayuda a entender por qué”. “Han aportado con nuevas ideas para comprender desde de las ciencias políticas por qué existen diferencias tan grandes en la prosperidad entre las naciones”, agregaron. “Sus trabajos han tenido una influencia decisiva en la investigación continua tanto en economía como en ciencias políticas. Y sus ideas sobre cómo las instituciones influyen en la prosperidad muestran que el trabajo para apoyar a la democracia y a las instituciones inclusivas es una forma importante de avanzar en la promoción del desarrollo económico”, finalizaron.
La organización humanitaria japonesa Nihon Hidankyo fue ungida este viernes por el Comité Noruego del Nobel como la acreedora del premio de la paz 2024 debido, principalmente, a sus denodados esfuerzos de décadas por instaurar “un veto” al uso de armas nucleares de exterminio humano. PUBLICIDAD Frente a las últimas señales que se han dado en el planeta por los conflictos bélicos desatados en diversos territorios, y la decisión de las grandes potencias nucleares de ampliar y mejorar sus arsenales químicos, fue que la organización del Premio Nobel decidió galardonar a este movimiento nipón que surgió en 1956 como consecuencia de los ataques con bombas nucleares a las ciudades de Hiroshima y Nagasaki en el fin de la Segunda Guerra Mundial. Un Premio Nobel para testimoniar los efectos nocivos de las armas nucleares “El Comité Noruego del Nobel ha querido reconocer un hecho alentador al conceder el Premio Nobel de la Paz de este año a Nihon Hidankyo: en casi 80 años no se ha utilizado ningún arma nuclear en una guerra. Los extraordinarios esfuerzos de Nihon Hidankyo y otros representantes de los Hibakusha han contribuido en gran medida a la instauración del veto nuclear. Por ello, es alarmante que hoy en día este tabú contra el uso de armas nucleares se encuentre bajo presión”, argumentaron desde la Fundación Nobel. El reconocimiento a la labor de contención y visualización de los nocivos efectos que las armas nucleares han tenido en las víctimas del ataque a suelo nipón por parte de esta organización fueron destacados no sólo por parte del Comité del Nobel, sino que por otras autoridades políticas mundiales, como el caso de la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen. “Han demostrado, mediante testimonios, que las armas nucleares no deben volver a utilizarse nunca más”, puntualizó Watne Frydnes, presidente del Comité Nobel noruego. En sintonía con sus dichos, las redes sociales del Nobel, expusieron además que este galardón llega a un año de cumplirse ocho décadas “desde que dos bombas atómicas estadounidenses mataron a unos 120 mil habitantes de Hiroshima y Nagasaki. Un número similar murió por quemaduras y lesiones por radiación en los meses y años siguientes”. “Las armas nucleares de hoy tienen un poder destructivo mucho mayor. Pueden matar a millones de personas y afectarían catastróficamente al clima. Una guerra nuclear podría destruir nuestra civilización”, reflexionaron. “Este premio a Nihon Hidankyo reconoce sus esfuerzos para lograr un mundo libre de armas nucleares y por demostrar, a través del testimonio de testigos, que las armas nucleares nunca deben volver a usarse”, finalizaron.
Este jueves el Comité del Nobel dio a conocer en Suecia el nombre de la acreedora del premio de literatura de este año, y que recayó en la escritora y poetisa surcoreana Han Kang. PUBLICIDAD Nacida en 1970, en la ciudad de Gwangju, Kang siempre estuvo destinada a darle forma a su talento en el mundo de las letras, considerando que su padre fue un reputado novelista, y su entorno en completa sincronización con variadas expresiones artísticas que le permitieron a la autora aventurarse no sólo en la literatura, sino que en la música y el arte en general. Premio Nobel al talento en prosa de autora surcoreana En su juventud, entre los 22 y 23 años (1993), la escritora dio sus primeros pasos en las letras gracias a una serie de incipientes ensayos (“El ancla escarlata”) y poemas que logró publicar en la revista surcoreana “Literatura y sociedad”. Un primer escalón para que dos años después se lanzara al mundo de la prosa con su colección de cuentos titulada “El amor de Yeosu”. Como profesional de las letras (titulada de la Universidad Yonsei), Kang también conoció del trabajo periodístico en sus primeros años, donde se desempeñó por tres años en revistas como “Publishing Journal” y “Samtoh”. Influida por una adolescencia compleja, que vivió en Seúl (donde se trasladó junto a su familia a los 11 años), y que estuvo llena de cuestionamientos respecto de la cotidianidad humana, los cuales finalmente decantaron en un destacable estilo en prosa que consolidó en sus posteriores obras. .Una de las más destacadas, según reseñaron en las redes sociales del Premio Nobel, la novela que publicó en 2002 “Tus manos frías”, que en palabras del comité “muestra claramente el interés de Kang por el arte”. Opens in new window El Comité del Premio Nobel galardonó a la escritora surcoreana Han Kang como la mejor literata de 2024. Fuente: Instagram @nobelprize_org. Ese talento en su trabajo fue el que acabó consolidando su figura a nivel mundial en 2007 gracias al lanzamiento de la novela “La vegetariana”, una suma de tres cuentos relacionados, en los que Kang se habría inspirado en un verso de Yi Sang donde postulaba que “creo que las personas han de ser plantas”. PUBLICIDAD “La obra de la autora retrata las violentas consecuencias que se producen cuando su protagonista Yeong-hye se niega a someterse a las normas de la ingesta de alimentos”, agrega el comité del Nobel, que destaca finalmente el afán de Kang por exponer en sus obras “una doble exposición al dolor, una correspondencia entre el tormento mental y el físico con estrechas conexiones con el pensamiento oriental”. Calificación que Kang ha corroborado con relatos que reflejan la fragilidad de la vida humana frente a traumas históricos y el conjunto casi invisible de reglas que estructuran finalmente el comportamiento deseado del ser humano.
Los profesores John Hopfield (91) y Geoffrey Hinton (76) han sido galardonados este martes por la Real Academia Sueca de las Ciencias por sus descubrimientos e invenciones” que han sido “fundamentales para el aprendizaje automático con redes neuronales artificiales, declaró el jurado. El nombre de los premiados fue leído por Hans Ellegren, secretario general de la organización que otorga los premios científicos más importante del mundo, desde Estocolmo (Suecia). Hopfield es profesor en la Universidad de Princeton (Estados Unidos), mientras que Hinton da clases en la Universidad de Toronto (Canadá). Estoy estupefacto. No tenía idea de que esto sucedería, declaró Hinton, a quien se ha apodado como “el padrino” de la inteligencia artificial. Las bases de la IA “El premio de este año es sobre máquinas que aprenden”, anunció el secretario general de la Academia sueca. Hopfield creó una memoria asociativa en 1982, la cual podía almacenar y reconstruir imágenes y otros tipos de patrones en los datos. Hinton, por su parte, desarrolló un método que permite a una máquina encontrar propiedades en los datos de forma autónoma y, por lo tanto, realizar tareas como identificar elementos específicos en imágenes. El trabajo de los científicos ha servido para que las computadoras sean capaces de imitar funciones humanas como la memoria y el aprendizaje. ¿Cómo? Utilizando conceptos y métodos fundamentales de la física, los científicos desarrollaron tecnologías que utilizan estructuras en redes para procesar información. Algunas de esas estructuras ya se utilizan a diario. El aprendizaje es una capacidad fascinante del cerebro humano, afirmó Ellen Moons, presidenta del Comité Nobel de Física, luego de leídos los nombre de los laureados. Nosotros podemos reconocer imágenes y asociarlas con memorias y experiencias pasadas. Billones de neuronas que están conectadas entre sí nos dan una capacidad cognitiva única, apuntó la miembro del jurado, quien indicó que las redes neuronales artificiales (desarrolladas por los premiados) están inspiradas en las redes neuronales de nuestro cerebro. Moons aseguró que el trabajo de los premiados no solo ha permitido avances en la astrofísica o el estudio de las partículas, sino que ya es nuestra vida cotidiana, a través de tecnologías comoel reconocimiento facial y la traducción de lenguajes. Avance con luces y sombras La presidenta del Comité Nobel de Física aseguró que los estudios de Hopfield y Hinton pueden ayudar a los seres humanos a tomar decisiones más rápidas y confiables a la hora de diagnosticar enfermedades. Sin embargo, también admitió que abren las puertas a situaciones peligrosas y riesgosas. Esto ya fue advertido por el propio Hinton, quien en 2023 renunció a su puesto como asesor de Google alertando sobre los riesgos que implicaba el rápido desarrollo de la inteligencia artificial. Nada más conocer sobre la concesión del premio a su persona, el profesor británico-canadinense insistió en sus llamados de atención. No tenemos experiencia sobre lo que es tener cosas más inteligentes que nosotros, declaró Hinton por teléfono en la conferencia de prensa del Nobel. Va a ser maravilloso en muchos aspectos, en áreas como la atención médica, aseveró, pero acto seguido indicó que también tenemos que preocuparnos por una serie de posibles consecuencias negativas. En particular, la amenaza de que estas cosas se salgan de control. En una entrevista a la BBC, el ahora premiado realizó un aterrador pronóstico que parece salido del guión de una película de Hollywood. Mi suposición es que, dentro de cinco o 20 años, habrá una probabilidad del 50% de que tengamos que afrontar el problema de que la inteligencia artificial intente tomar el control de nuestras vidas, dijo. Hinton cree que la humanidad podría tener que enfrentar en un futuro cercano un dilema parecido al de la película Terminator, donde las máquinas se alzan contra los humanos. Haciendo memoria Considerado ampliamente como el premio más prestigioso del mundo para los físicos, el reconocimiento fue creado, junto con los galardones por logros en medicina, literatura y paz, en el testamento de Alfred Nobel. Desde 1901 se han concedido 117 veces y en la lista de ganadores anteriores figuran superestrellas científicas como Albert Einstein, Niels Bohr y Enrico Fermi. El año pasado, tres investigadores ganaron el premio por sus avances en el campo del estudio de los electrones. El premio fue para la física franco-sueca Anne L’Huillier, el científico francés Pierre Agostini y el húngaro Ferenc Krausz, quienes utilizaron destellos de luz de una duración de attosegundos (un billonésimo de segundo) para iluminar moléculas y proporcionar breves visiones de cómo viajan los electrones a gran velocidad. El australiano William Lawrence Bragg el honrado más joven -con 25 años- por sus trabajos en “el análisis de la estructura cristalina mediante rayos X”. Por su parte, el científico con mayor fue Arthur Ashkin, quien en 2018 recibió el premio a sus 96 años “por las pinzas ópticas y su aplicación a los sistemas biológicos”.
Los científicos estadounidenses David Baker y John Jumper, y británico Demis Hassabis fueron galardonados este miércoles con el Premio Nobel de Química 2024 gracias a sus investigaciones respecto de la predicción de la estructura de las proteínas mediante la inteligencia artificial. PUBLICIDAD En el caso de Baker, debido a su trabajo en el diseño computacional de proteínas; y en el de Hassabis y Jumper por la predicción de la estructura de las proteínas, según informó esta mañana el comité del Nobel. Los nuevos ganadores del Premio Nobel El presidente del comité, Heiner Linke, afirmó que este premio honraba la investigación que estos científicos lideraron respecto de las conexiones entre la secuencia de aminoácidos y la estructura de proteínas. “De hecho, durante décadas se le ha llamado el gran reto de la química y, en particular, de la bioquímica. Por eso hoy se premia ese gran avance”, afirmó Linke. El anuncio fue publicado tanto en la cuenta oficial del Nobel en Instagram como en su canal de YouTube, donde se expuso que este galardón “tiene que ver con las proteínas, las ingeniosas herramientas químicas de la vida”. “David Baker ha logrado la hazaña casi imposible de construir tipos de proteínas completamente nuevos. Demis Hassabis y John Jumper han desarrollado un modelo de IA para resolver un problema de 50 años: predecir las estructuras complejas de las proteínas. Estos descubrimientos tienen un potencial enorme”, agregaron. “La diversidad de la vida da testimonio de la asombrosa capacidad de las proteínas como herramientas químicas. Controlan e impulsan todas las reacciones químicas que juntas son la base de la vida. Las proteínas también funcionan como hormonas, sustancias señalizadoras, anticuerpos y los componentes básicos de diferentes tejidos”, explicaron. PUBLICIDAD Opens in new window Este miércoles se conocieron los ganadores del Premio Nobel de Química 2024. Fuente: Instagram @nobelprize_org. “La vida no podría existir sin las proteínas. El hecho de que ahora podamos predecir las estructuras de las proteínas y diseñar nuestras propias proteínas confiere el mayor beneficio a la humanidad”, aseguraron. Cabe señalar que los científicos Hassabis y Jumper trabajan en el Google Deepmind de Londres, Inglaterra; mientras que Baker realiza sus investigaciones bajo el alero de la Universidad de Washington, en Seattle, Estados Unidos.