25 de abril de 2024
La NASA ha anunciado que la sonda espacial Voyager 1, el objeto creado por la humanidad más alejado de la Tierra, ha vuelto a entrar en contacto después de haber dejado de transmitir datos científicos y técnicos fiables en noviembre. La agencia espacial estadounidense explicó que el problema se debía a un chip defectuoso en una de las computadoras a bordo, pero los equipos lograron encontrar una solución ingeniosa para corregir el error y recuperar la transmisión de datos.
Voyager 1, lanzada hace más de 46 años, se encuentra a aproximadamente 24.000 millones de kilómetros en el espacio y es una de las dos únicas sondas viajando en el espacio interestelar junto con su gemela Voyager 2. Ambas llevan grabaciones de sonidos e imágenes de la Tierra en placas de oro y cobre.
Voyager 1 y 2 volaron sobre Júpiter, Saturno, Urano, Neptuno y 48 de sus lunas. Los datos recolectados por los nueve instrumentos a bordo de cada una de las sondas las convierten en la misión de exploración del sistema solar más fructífera científicamente de toda la historia espacial.
A pesar de que su esperanza de vida inicial no era mayor a cinco años, ambas sondas continúan funcionando a día de hoy y han superado todas las expectativas. Desde 2012, Voyager 1 salió del sistema solar para adentrarse en el frío y la oscuridad del espacio interestelar.
El programa Voyager tenía como objetivo estudiar los planetas del sistema solar, y ambas sondas han recopilado datos valiosos durante su trayectoria. Además, transportan discos dorados con fotografías, sonidos naturales y mensajes en múltiples idiomas como parte del proyecto "Mensaje al Espacio".
Palabras del entonces presidente estadounidense, Jimmy Carter (1977-1981), y del secretario general de la ONU Kurt Waldheim viajan en esas sondas desde hace más de 35 años.
Según los científicos, Voyager 1 continuará su periplo durante mucho tiempo sin obstáculos significativos. Se estima que estará cerca de otras estrellas dentro de unos cuarenta mil años.
“Nada puede detener el camino de Voyager 1 en el espacio, que continuará su periplo durante mucho mucho tiempo, probablemente mil millones de años”, predijo el astrofísico Marc Swisdal.