En los años 70 surgió el recordado grupo sueco de pop llamado ABBA, del que formaba parte Anni-Frid Lyngstad, más conocida como Frida. La joven, de pelo negro, deslumbró con su voz angelical con canciones como 'Dancing Queen', sin embargo, antes de toda su fama, tuvo una sorprendente infancia ligada con los nazis. La infancia de Frida Frida nació el 15 de noviembre de 1945 en Noruega, unos cinco meses después del final de la Segunda Guerra Mundial y la derrota de los nazis. Su madre, Synni, tenía 19 años y había quedado embarazada de un soldado alemán, antes de que este fuera enviado de regreso a Alemania para defender una derrota que ya era irremediable. El país nórdico de Europa había sido tomado por los nazis durante la guerra, por lo que tras la derrota de Hitler y sus aliados, las mujeres que habían estado con soldados alemanes eran consideradas como traidoras, al punto de que las escupían e insultaban por la calle. Por ello, Synni junto a su bebé recién nacida partieron rumbo a Suecia. Al poco tiempo Synni murió de una enfermedad y a cargo de la bebé quedó su abuela Arntine. Con los años, Frida comenzó a mostrar interés por la música y empezó a cantar profesionalmente a los 13 años. Llegó a la TV sueca, ganó concursos, se casó joven y tuvo dos hijos, pero el matrimonio duró muy poco. Más tarde conoció a Benny Andersson, un joven músico y productor, quien terminó siendo una de las B de ABBA y su futuro marido. Los dos conocieron a otra pareja de novios con la combinación AB en sus nombres, Björn Ulvaeus y Agnetha Fältskog, con los que formaron el grupo ABBA para alcanzar la fama. El experimento nazi del que nació Frida Según contó Infobae, en 1977 una fan alemana descubrió que su tío Alfred Haase era el padre de Frida. Al principio la cantante no creía que su papá estuviera vivo, pues nunca lo había conocido y su abuela le había contado que murió como un héroe de guerra en un barco. Pese a las dudas, Frida conoció a su padre, quien estaba casado y tenía dos hijos. Se vieron unas pocas veces, pero la relación no prosperó, pues lo consideraba un desconocido. Con los años, la cantante se decepcionó más al comprobar que había sido parte de un perverso programa nazi llamado Lebensborn Eingetragener, creado por Heinrich Himmler. El programa buscaba expandir la raza aria por toda Europa y se puso en marcha en los territorios ocupados por los nazis, como por ejemplo Noruega. Para ello, los soldados alemanes debían estar con mujeres que fueran de raza pura, arias o nórdicas. El programa ofrecía asistencia económica, programas de adopción y creación de orfanatos para que los niños vivieran. Incluso, las madres recibían una suerte de subsidio, ayuda económica para alimentos y pañales, o la seguridad de que sus hijos serían criados en un instituto del estado y dados en adopción. Las jóvenes que participaron en el programa muchas veces lo hicieron por necesidad u obligadas por oficiales nazis bajo violaciones. Estas mujeres luego fueron denigradas por sus países y la madre de Frida no pudo recibir el apoyo prometido tras la caída de los nazis. Se calcula que en Noruega nacieron alrededor de 8.000 los niños bajo el experimento Lebensborn para así crear una raza superior. El presente de Frida Frida descubrió su oscuro origen siendo una estrella mundial, aunque nunca quiso volver a hablar del tema. Con los años ambas parejas de ABBA se separaron y el grupo se terminó en 1982, aunque en 2021 tuvieron un breve regreso con un par de canciones. Con los años, Frida se hizo parte de la realeza sueca tras casarse en 1992 con el príncipe Henri Ruzo Reus von Plauen. Sin embargo, la cantante vivió años trágicos tras la muerte en un accidente de tránsito en 1998 de su hija Anne Lise, del primer matrimonio, mientras que al año siguiente, el príncipe murió de un cáncer linfático. Tras ello, Frida se ha mantenido alejada de las cámaras y actualmente, a sus 79 años, vive tranquilamente en Suiza. Ahora detenta el título de Su Alteza Serenísima la princesa Anni-Frid de Reuss, condesa de Plauen.
En los años 70 surgió el recordado grupo sueco de pop llamado ABBA, del que formaba parte Anni-Frid Lyngstad, más conocida como Frida. La joven, de pelo negro, deslumbró con su voz angelical con canciones como 'Dancing Queen', sin embargo, antes de toda su fama, tuvo una sorprendente infancia ligada con los nazis. La infancia de Frida Frida nació el 15 de noviembre de 1945 en Noruega, unos cinco meses después del final de la Segunda Guerra Mundial y la derrota de los nazis. Su madre, Synni, tenía 19 años y había quedado embarazada de un soldado alemán, antes de que este fuera enviado de regreso a Alemania para defender una derrota que ya era irremediable. El país nórdico de Europa había sido tomado por los nazis durante la guerra, por lo que tras la derrota de Hitler y sus aliados, las mujeres que habían estado con soldados alemanes eran consideradas como traidoras, al punto de que las escupían e insultaban por la calle. Por ello, Synni junto a su bebé recién nacida partieron rumbo a Suecia. Al poco tiempo Synni murió de una enfermedad y a cargo de la bebé quedó su abuela Arntine. Con los años, Frida comenzó a mostrar interés por la música y empezó a cantar profesionalmente a los 13 años. Llegó a la TV sueca, ganó concursos, se casó joven y tuvo dos hijos, pero el matrimonio duró muy poco. Más tarde conoció a Benny Andersson, un joven músico y productor, quien terminó siendo una de las B de ABBA y su futuro marido. Los dos conocieron a otra pareja de novios con la combinación AB en sus nombres, Björn Ulvaeus y Agnetha Fältskog, con los que formaron el grupo ABBA para alcanzar la fama. El experimento nazi del que nació Frida Según contó Infobae, en 1977 una fan alemana descubrió que su tío Alfred Haase era el padre de Frida. Al principio la cantante no creía que su papá estuviera vivo, pues nunca lo había conocido y su abuela le había contado que murió como un héroe de guerra en un barco. Pese a las dudas, Frida conoció a su padre, quien estaba casado y tenía dos hijos. Se vieron unas pocas veces, pero la relación no prosperó, pues lo consideraba un desconocido. Con los años, la cantante se decepcionó más al comprobar que había sido parte de un perverso programa nazi llamado Lebensborn Eingetragener, creado por Heinrich Himmler. El programa buscaba expandir la raza aria por toda Europa y se puso en marcha en los territorios ocupados por los nazis, como por ejemplo Noruega. Para ello, los soldados alemanes debían estar con mujeres que fueran de raza pura, arias o nórdicas. El programa ofrecía asistencia económica, programas de adopción y creación de orfanatos para que los niños vivieran. Incluso, las madres recibían una suerte de subsidio, ayuda económica para alimentos y pañales, o la seguridad de que sus hijos serían criados en un instituto del estado y dados en adopción. Las jóvenes que participaron en el programa muchas veces lo hicieron por necesidad u obligadas por oficiales nazis bajo violaciones. Estas mujeres luego fueron denigradas por sus países y la madre de Frida no pudo recibir el apoyo prometido tras la caída de los nazis. Se calcula que en Noruega nacieron alrededor de 8.000 los niños bajo el experimento Lebensborn para así crear una raza superior. El presente de Frida Frida descubrió su oscuro origen siendo una estrella mundial, aunque nunca quiso volver a hablar del tema. Con los años ambas parejas de ABBA se separaron y el grupo se terminó en 1982, aunque en 2021 tuvieron un breve regreso con un par de canciones. Con los años, Frida se hizo parte de la realeza sueca tras casarse en 1992 con el príncipe Henri Ruzo Reus von Plauen. Sin embargo, la cantante vivió años trágicos tras la muerte en un accidente de tránsito en 1998 de su hija Anne Lise, del primer matrimonio, mientras que al año siguiente, el príncipe murió de un cáncer linfático. Tras ello, Frida se ha mantenido alejada de las cámaras y actualmente, a sus 79 años, vive tranquilamente en Suiza. Ahora detenta el título de Su Alteza Serenísima la princesa Anni-Frid de Reuss, condesa de Plauen.