31 de marzo de 2025
Asumir el desafío de comenzar los estudios no es fácil, así lo dan a conocer las decenas de artículos publicados por especialistas sobre qué carrera elegir, las brechas de acceso y las diferencias de aprendizaje entre educación pública y privada, entre muchos otros factores. Pese a ello son miles los estudiantes que ingresan año a año a la educación superior, ejemplo de ello es lo sucedido en Santo Tomás La Serena, donde en 2025 ingresaron más de dos mil nuevos alumnos.
Muchas historias entre los nuevos ingresos, entre las que destaca la de María Cristina Seura, serenense de 71 años, 6 hijos y más de una decena de nietos, incluyendo bisnietos, que decidió darse una nueva oportunidad para cumplir su sueño de estudiar Servicio Social. “Siempre he dicho, que cuando estuve chica tuve muy buena base y hasta la fecha nunca se me olvidaron, ni el respeto, ni las matemáticas y siempre le dije a mi hija, <no será el día de mañana, pero sacaré mis estudios> porque tenía solo hasta 8vo básico y el año pasado hice los cursos saliendo con un 6,8 de cuarto medio y por eso tomé la decisión de estudiar”, comenzó relatando María Cristina.
Fue dirigente vecinal del sector el Olivar, ayudando en distintos proyectos en los cuales sentía concretarse su vocación, con un relato de historia muy dura en la cual el poder sacar adelante sus hijos fue el motor para seguir. “A pesar del sufrimiento no me derrumbé tan fácilmente, por eso busqué en primer lugar la educación de mis hijos, luego tuve a mi esposo postrado casi 13 años y luego que falleció él, mis hijas estudiaron y formaron su vida y decidí seguir con lo que siempre quise ser que fue asistente social”.
María Cristina relató las dificultades al iniciar una nueva etapa educativa “lo que me ha costado es la computadora, es lo que más odio y el teléfono, no me gustan, me gusta escribir”, pero pese a ello agradece el apoyo desde la institución “los profesores todos me han apoyado y lo comenté en las semanas de inducción y desde que empecé acá me están haciendo tutorías individuales, ya aprendí a poner mi nombre y los códigos de acá, lo que para mí eso es un logro”.
Una de las nietas de María Cristina es actualmente estudiante de la carrera de Educación Diferencial en Santo Tomás, por ello para ella también es importante poder aconsejar a los tomasinos más jóvenes sobre las decisiones importantes en la vida. “El mensaje para los más jóvenes, y se los he dicho, que siempre hagan caso a la mamá porque ellas siempre querrán lo mejor para ellos, y siempre que mantengan el respeto”.
La historia de la nueva tomasina estuvo cargada durante décadas por hechos que son difíciles de relatar, pero pese a ello a los 71 años está viviendo un nuevo comienzo que demuestra que nunca es tarde para cumplir los sueños.
Fuente: DiarioElDia Región