Un reciente estudio estableció que, en paralelo a la existencia de los fenómenos El Niño y La Niña, existe un patrón que también estaría influyendo en los climas extremos que vive el mundo. Lo bautizaron como “el nuevo El Niño”. Hace poco recibimos la llegada de un potente fenómeno El Niño. Este fue el responsable de la temporada de lluvias que vivieron algunos países en 2023 y mitad de 2024, como Chile, pero también rompió récords de altas temperaturas alrededor de todo el mundo. El 2023 fue el año más caluroso de la historia y, ahora, se prevé la llegada de su opuesto, el fenómeno La Niña, que promete “equilibrar” el termómetro, pues su efecto suele ser bajar varios grados por sobre la media a la temperatura superficial del mar. Qué es El Niño-Oscilación del Sur y cómo afecta al clima en Chile Estos dos eventos climáticos son parte de El Niño-Oscilación del Sur (ENOS), un fenómeno natural que tiene el poder de cambiar el clima y provocar cambios extremos en él. Sin embargo, todo apunta a que el ENOS no es el único fenómeno entre nosotros que puede afectar al clima del mundo de forma drástica. Un grupo de científicos acaba de encontrar que en el mundo existe un “ nuevo El Niño ”. Esto es lo que se sabe del nuevo fenómeno del clima y cómo podría afectarnos. Qué es el “nuevo El Niño” que descubrió un grupo de científicos Un grupo de investigadores de la Universidad de Reading, en Inglaterra, identificó un nuevo patrón de clima que podría afectar al planeta, al igual que lo hacen el fenómeno La Niña y El Niño. Los científicos lo bautizaron como Southern Hemisphere Circumpolar Wavenumber-4 Pattern (Patrón circumpolar número de onda 4 del hemisferio sur o SST-W4) y, como lo dice su nombre, explicaron que afecta en especial al hemisferio sur del planeta. Según explicaron en Deutsche Welle, este fenómeno comenzaría en las aguas subtropicales cercanas del suroeste del océano Pacífico —cerca de Nueva Zelanda y Australia — y tendría “notables paralelismos” con el fenómeno El Niño. En 2021, los científicos especialistas en clima ya habían identificado que existía un patrón extraño que afectaba las fluctuaciones en la temperatura superficial del mar de esta zona, pero no entendían cómo ni por qué funcionaba así. Ahora, en un estudio que publicaron en la revista Journal of Geophysical Research: Oceans, el grupo de investigación determinó que el SST-W4 tiene un “ impacto considerable ” en los vientos y temperaturas del mar en todo el hemisferio sur (la mayor parte de Sudamérica, Oceanía, una parte de África y Asia). Esto significa que también influye en la temperatura y el clima de todas estas zonas. Pero, a diferencia del fenómeno El Niño que emerge en los trópicos, este patrón se origina en las latitudes medias. ¿ Por qué a los científicos les preocupa este fenómeno climático nuevo y desconocido? “Este descubrimiento significa hallar un nuevo cambio en el clima de la Tierra. Se trata de una nueva demostración de cómo un área relativamente pequeña del océano puede tener efectos de gran alcance en los patrones climáticos y meteorológicos globales”, aseguró en una nota de prensa el científico y autor principal del estudio, Balaji Senapati. El experto, que también es meteorólogo de la Universidad de Reading, describió este hallazgo como “un nuevo interruptor en el clima de la Tierra”. Para ilustrar mejor cómo influye en el clima el SST-W4 (el nuevo “El Niño”), el especialista explicó que este patrón crea cuatro zonas alternas de aire cálido y frío en el hemisferio sur. Se activa por los cambios en las temperaturas del océano en una pequeña región del Pacífico subtropical y es ahí donde comienzan los efectos significativos en el mundo. Según se lee en el estudio, la temporada alta del SST-W4 sería durante el verano austral —es decir, el verano del hemisferio sur que inicia el 21 de diciembre y concluye el 20 de marzo—. Esto quiere decir que los cambios en el clima provocados por este nuevo fenómeno comenzarían entre diciembre y febrero. Además, esto sucedería todos los años. Después de utilizar modelos climáticos capaces de estudiar 300 años, los especialistas detectaron que este patrón se repite anualmente en el hemisferio sur. Un artículo publicado en Science Alert advirtió que este ciclo podría generar “ una intensa inestabilidad climática y fenómenos meteorológicos extremos ”, pero resaltó la importancia de estudiar mejor y conocer a fondo este nuevo fenómeno, para poder predecir a tiempo qué consecuencias puede tener sobre los países afectados y el resto del mundo. La Niña Lo curioso es que este patrón climático, SST-W4, aunque se dice que es un “nuevo fenómeno”, en realidad siempre ha estado ahí, solo que oculto. Los científicos que lo descubrieron admitieron que lleva mucho tiempo influyendo el clima del mundo, solo que nadie lo sabía hasta ahora, que lograron detectarlo. “La comprensión de este nuevo sistema meteorológico podría mejorar enormemente las previsiones meteorológicas y climáticas, especialmente en el hemisferio sur. Podría ayudar a explicar cambios climáticos hasta ahora misteriosos y mejorar nuestra capacidad para predecir fenómenos meteorológicos y climáticos extremos”, resaltó el investigador Senapati. No obstante, no significa que haya que perder de vista a los fenómenos El Niño y La Niña: este nuevo patrón que cambia el clima se establece de forma independiente respecto a otros fenómenos que también tienen la capacidad de influir en las temperaturas y vientos. Algo extraño está pasando en el mar: la preocupación de los científicos por la situación de los océanos Aún así, faltan nuevos estudios e investigaciones para entender cómo conviven todos estos patrones naturales. Quizás, el SST-W4 podría haber estado potenciando algunos efectos del Niño o La Niña todos estos años, pero todavía es muy temprano para saberlo. Lo que sí, es que los investigadores también llaman al SST-W4 como “el nuevo El Niño” porque, en primera instancia, comparten ciertas características, como cambiar las temperaturas del océano. Sin embargo, todavía no hay certidumbre para afirmar cuáles exactamente son los efectos de este recién descubierto patrón climático.
Un reciente estudio estableció que, en paralelo a la existencia de los fenómenos El Niño y La Niña, existe un patrón que también estaría influyendo en los climas extremos que vive el mundo. Lo bautizaron como “el nuevo El Niño”. Hace poco recibimos la llegada de un potente fenómeno El Niño. Este fue el responsable de la temporada de lluvias que vivieron algunos países en 2023 y mitad de 2024, como Chile, pero también rompió récords de altas temperaturas alrededor de todo el mundo. El 2023 fue el año más caluroso de la historia y, ahora, se prevé la llegada de su opuesto, el fenómeno La Niña, que promete “equilibrar” el termómetro, pues su efecto suele ser bajar varios grados por sobre la media a la temperatura superficial del mar. Qué es El Niño-Oscilación del Sur y cómo afecta al clima en Chile Estos dos eventos climáticos son parte de El Niño-Oscilación del Sur (ENOS), un fenómeno natural que tiene el poder de cambiar el clima y provocar cambios extremos en él. Sin embargo, todo apunta a que el ENOS no es el único fenómeno entre nosotros que puede afectar al clima del mundo de forma drástica. Un grupo de científicos acaba de encontrar que en el mundo existe un “ nuevo El Niño ”. Esto es lo que se sabe del nuevo fenómeno del clima y cómo podría afectarnos. Qué es el “nuevo El Niño” que descubrió un grupo de científicos Un grupo de investigadores de la Universidad de Reading, en Inglaterra, identificó un nuevo patrón de clima que podría afectar al planeta, al igual que lo hacen el fenómeno La Niña y El Niño. Los científicos lo bautizaron como Southern Hemisphere Circumpolar Wavenumber-4 Pattern (Patrón circumpolar número de onda 4 del hemisferio sur o SST-W4) y, como lo dice su nombre, explicaron que afecta en especial al hemisferio sur del planeta. Según explicaron en Deutsche Welle, este fenómeno comenzaría en las aguas subtropicales cercanas del suroeste del océano Pacífico —cerca de Nueva Zelanda y Australia — y tendría “notables paralelismos” con el fenómeno El Niño. En 2021, los científicos especialistas en clima ya habían identificado que existía un patrón extraño que afectaba las fluctuaciones en la temperatura superficial del mar de esta zona, pero no entendían cómo ni por qué funcionaba así. Ahora, en un estudio que publicaron en la revista Journal of Geophysical Research: Oceans, el grupo de investigación determinó que el SST-W4 tiene un “ impacto considerable ” en los vientos y temperaturas del mar en todo el hemisferio sur (la mayor parte de Sudamérica, Oceanía, una parte de África y Asia). Esto significa que también influye en la temperatura y el clima de todas estas zonas. Pero, a diferencia del fenómeno El Niño que emerge en los trópicos, este patrón se origina en las latitudes medias. ¿ Por qué a los científicos les preocupa este fenómeno climático nuevo y desconocido? “Este descubrimiento significa hallar un nuevo cambio en el clima de la Tierra. Se trata de una nueva demostración de cómo un área relativamente pequeña del océano puede tener efectos de gran alcance en los patrones climáticos y meteorológicos globales”, aseguró en una nota de prensa el científico y autor principal del estudio, Balaji Senapati. El experto, que también es meteorólogo de la Universidad de Reading, describió este hallazgo como “un nuevo interruptor en el clima de la Tierra”. Para ilustrar mejor cómo influye en el clima el SST-W4 (el nuevo “El Niño”), el especialista explicó que este patrón crea cuatro zonas alternas de aire cálido y frío en el hemisferio sur. Se activa por los cambios en las temperaturas del océano en una pequeña región del Pacífico subtropical y es ahí donde comienzan los efectos significativos en el mundo. Según se lee en el estudio, la temporada alta del SST-W4 sería durante el verano austral —es decir, el verano del hemisferio sur que inicia el 21 de diciembre y concluye el 20 de marzo—. Esto quiere decir que los cambios en el clima provocados por este nuevo fenómeno comenzarían entre diciembre y febrero. Además, esto sucedería todos los años. Después de utilizar modelos climáticos capaces de estudiar 300 años, los especialistas detectaron que este patrón se repite anualmente en el hemisferio sur. Un artículo publicado en Science Alert advirtió que este ciclo podría generar “ una intensa inestabilidad climática y fenómenos meteorológicos extremos ”, pero resaltó la importancia de estudiar mejor y conocer a fondo este nuevo fenómeno, para poder predecir a tiempo qué consecuencias puede tener sobre los países afectados y el resto del mundo. La Niña Lo curioso es que este patrón climático, SST-W4, aunque se dice que es un “nuevo fenómeno”, en realidad siempre ha estado ahí, solo que oculto. Los científicos que lo descubrieron admitieron que lleva mucho tiempo influyendo el clima del mundo, solo que nadie lo sabía hasta ahora, que lograron detectarlo. “La comprensión de este nuevo sistema meteorológico podría mejorar enormemente las previsiones meteorológicas y climáticas, especialmente en el hemisferio sur. Podría ayudar a explicar cambios climáticos hasta ahora misteriosos y mejorar nuestra capacidad para predecir fenómenos meteorológicos y climáticos extremos”, resaltó el investigador Senapati. No obstante, no significa que haya que perder de vista a los fenómenos El Niño y La Niña: este nuevo patrón que cambia el clima se establece de forma independiente respecto a otros fenómenos que también tienen la capacidad de influir en las temperaturas y vientos. Algo extraño está pasando en el mar: la preocupación de los científicos por la situación de los océanos Aún así, faltan nuevos estudios e investigaciones para entender cómo conviven todos estos patrones naturales. Quizás, el SST-W4 podría haber estado potenciando algunos efectos del Niño o La Niña todos estos años, pero todavía es muy temprano para saberlo. Lo que sí, es que los investigadores también llaman al SST-W4 como “el nuevo El Niño” porque, en primera instancia, comparten ciertas características, como cambiar las temperaturas del océano. Sin embargo, todavía no hay certidumbre para afirmar cuáles exactamente son los efectos de este recién descubierto patrón climático.