Comenzaron las postulaciones para la novena versión del programa de Participación Social SOMOS, presentado por Fundación Minera Escondida (FME), iniciativa que promueve el desarrollo de habilidades y competencias en jóvenes con el objetivo que puedan impulsar proyectos sociales y así impactar positivamente en el territorio. Este año, el llamado es a jóvenes de la región de Antofagasta entre 20 y 32 años, que lideren o formen parte de iniciativas comunitarias a través de agrupaciones, colectivos u organizaciones sociales. El plazo de postulación se extenderá hasta el domingo 19 de mayo a través de www.fme.cl, mientras que el 26 de junio se publicarán los resultados en el mismo sitio. “Queremos ver a jóvenes empoderados trabajando juntos para idear y ejecutar iniciativas transformadoras. Este proceso formativo les permitirá movilizarse, conectarse con otros líderes sociales y actores del ecosistema, generar alianzas y fortalecer su trabajo con la convicción de construir una mejor región de la mano de las nuevas generaciones”, señaló María Alejandra Cifuentes, Líder de Programas de FME. Comunidad de Agentes de Cambio A la fecha, más de 500 jóvenes líderes de la Región de Antofagasta han participado de este programa formativo, donde han desarrollado habilidades comunicacionales, de trabajo en equipo, reflexión crítica y otras herramientas que les ha permitido fortalecer su liderazgo. “Dentro de todo lo que nos enseñó el Somos está el desarrollo del pensamiento creativo, que es una de las partes que más me impactó, porque hay momentos en los proyectos en que uno se frena, y gracias a las herramientas que nos entregó el programa pudimos salir del estancamiento y comenzar a generar nuevos proyectos”, aseguró Lucas Vega, egresado Somos 2023. Así mismo, Paola Flores, quien participó del programa en 2022, destacó la importancia de robustecer las habilidades de los y las jóvenes líderes, “nos ayuda a canalizar nuestras motivaciones para que las podamos desarrollar de manera integral. En el plan formativo se ve todo lo que pueda servir para ejecutar un proyecto y también cómo conectar con el ecosistema social, sin duda este programa expande tus campos de posibilidades”. Para más información relacionada a la convocatoria pueden revisar las rede sociales de FME: @fundacionmineraescondida (Instagram) y Fundación Minera Escondida (Facebook).
El término woke (estar ‘despierto/a’ en inglés) ha ganado popularidad en los últimos años, especialmente en las redes sociales y la cultura pop. Originalmente utilizado para describir a alguien que está consciente de las injusticias sociales y raciales, el concepto de estar woke ha evolucionado para abarcar una mayor conciencia sobre una variedad de temas, incluyendo el feminismo, la igualdad de género, los derechos LGBTQ+, entre otros. A su vez, ha sido herramienta de marketing para grandes compañías y una forma de desacreditar de la derecha conservadora a los valores progresistas. El primer antecedente popular del término woke como llamamiento a las personas africanas y afrodescendientes fue del predicador, periodista y empresario jamaicano Marcus Garvey en 1923: “Wake up, Ethiopia! Wake up, Africa!” (‘¡Despierta, Etiopía! Despierta, África!’). Con esas palabras, el fundador de la Asociación Universal para la Mejora del Hombre Negro buscaba despertar la conciencia social y política entre las personas negras del mundo. Ya en 1938, el cantante afroamericano Lead Belly advertía “stay woke” (‘estad despiertos’) en el epílogo hablado de su canción protesta Scottsboro Boys. Esta canción narra la historia de los nueve adolescentes afroamericanos acusados injustamente de violar a dos mujeres blancas en Scottsboro, Arkansas, en 1931. En la actualidad, ser woke implica estar informado y comprometido con cuestiones relevantes a nivel social y político. Las personas que se identifican como woke suelen estar activamente involucradas en movimientos sociales, defensa de los derechos humanos y promoción del cambio positivo en la sociedad. Aunque el término puede generar controversia y críticas por su uso excesivo o superficialidad en algunas ocasiones, no se puede negar que ha generado un mayor interés por parte de las generaciones más jóvenes en temas importantes que afectan a nuestra sociedad. Es importante recordar que ser verdaderamentewoke va más allá de simplemente adoptar modas o tendencias; implica educarse constantemente, escuchar a diferentes perspectivas y tomar acciones concretas para contribuir a un mundo más justo e inclusivo.
¿Qué es la felicidad? ¿Existe un secreto para obtenerla? Esas son preguntas que han ocupado a filósofos e investigadores de los más amplios rubros durante cientos de años. Tan importante es, que se la considera una meta humana fundamental y tiene su propia efeméride: el Día Internacional de la Felicidad.Cuándo se celebra el Día Internacional de la FelicidadLa efeméride tiene lugar el 20 de marzo de cada año. Fue promulgada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2012 para “reconocer la relevancia de la felicidad y el bienestar como aspiraciones universales de los seres humanos y la importancia de su inclusión en las políticas de gobierno”. Cuáles son los 10 países más felices del mundo. Cada año se publica el Informe mundial de la Felicidad coincidiendo con la celebración del Día Internacional. Conforme a ese listado, que es resultado de evaluaciones de vida autoevaluadas promediadas durante los años 2021-2023, los 10 países más felices del mundo son los siguientes: 1. Finlandia. 2. Dinamarca. 3. Islandia. 4. Suecia. 5. Israel. 6. Países Bajos. 7. Noruega. 8. Luxemburgo. 9. Suiza. 10. Australia. Si se tiene en cuenta el ranking de las 25 naciones más felices del mundo, dos países latinoamericanos figuran en el listado: Costa Rica (que se localiza en el 12° puesto) y México (en el lugar 25°). ¿Cuál es el país más infeliz del mundo? Cabe destacar que Finlandia encabeza la lista general por séptimo año consecutivo. Mientras que Afganistán sigue ocupando el último puesto de la clasificación como la naciónmás infeliz del mundo.Por otro lado, Letonia (46º) y Congo (89º), con aumentos de 44 y 40 posiciones respectivamente entre 2013 y 2024, fueron las naciones con mayores incrementos en las evaluaciones de vida registradas en la encuesta. Cuáles son los países más felices para cada edad. Otro dato a destacar es que en esta ocasión el informe ofrece clasificaciones separadas por grupos de edad. En ese sentido, Lituania encabeza la lista para los niños y jóvenes menores de 30 años, mientras que Dinamarca es la nación más feliz del mundo para los mayores de 60 años. “Al comparar generaciones, los nacidos antes de 1965 son, de media, más felices que los nacidos a partir de 1980. Entre los Millennials (personas nacidas entre 1981 y 1996, según la Enciclopedia Britannica), la valoración de la propia vida desciende con cada año de edad, mientras que entre los Boomers (personas nacidas entre 1946 y 1964, aproximadamente) la satisfacción vital aumenta con la edad”, describe el reporte. En cuanto a los jóvenes de 15 a 24 años, los hallazgos muestran que su bienestar ha disminuido en América del Norte, Europa Occidental, Oriente Medio, Norte de África y Asia Meridional desde 2019, pero en el resto del mundo ha aumentado. No obstante, reconoce el informe, hay una “notable escasez global de datos de bienestar disponibles para niños menores de 15 años”. Un informe para saber cuáles son los países más felices del mundo. El Informe mundial de la Felicidad ofrece un panorama de la situación en el mundo y “refleja la demanda mundial de que se preste más atención a la felicidad y el bienestar como criterios para la política gubernamental”, según indica el sitio web del reporte. En el escrito se incluye una clasificación de la felicidad en diferentes países. Esa categorización, explica el sitio web del informe, se realiza a partir de la evaluación de las personas sobre sus vidas, que se mide utilizando la Escalera Cantril, en la cual los encuestados califican sus vidas actuales en una escala de 0 a 10, donde la mejor vida posible es el 10 y la peor vida posible es un 0. Esas clasificaciones provienen de muestras representativas a nivel nacional durante tres años.El documento es resultado del trabajo colaborativo entre Gallup, el Centro de Investigación sobre el Bienestar de la Universidad de Oxford, la Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas y el Consejo Editorial del Informe.
Los adultos de mediana edad y mayores tienden a sentirse más jóvenes que su edad cronológica, según muestran las investigaciones. Y esto puede ser algo bueno. Una investigación ha encontrado consistentemente que sentirse más joven generalmente se asocia con una mejor salud. Markus Wettstein, psicólogo de la Universidad Humboldt de Berlín señaló, “sabemos que aquellos que se sienten más jóvenes son más saludables” y agregó: “también se mantienen más saludables con el tiempo”. Los adultos mayores que se sienten jóvenes de corazón no solo pueden vivir más tiempo, sino que también pueden tener una mayor satisfacción con la vida, un menor riesgo de demencia, menos síntomas de depresión y una mejor salud en el futuro. Una nueva investigación sugiere que los adultos de mediana edad y mayores de hoy pueden sentirse más jóvenes que sus antepasados. Un estudio publicado en Psychological Science informó que, con el tiempo, los adultos se han sentido más jóvenes y más jóvenes que aquellos de la misma edad cronológica en el pasado, incluso teniendo en cuenta otros factores que podrían influir en la edad subjetiva, como enfermedades crónicas, soledad. y nivel educativo. La investigación también encontró una brecha de género pronunciada. Las mujeres informaron sentirse más jóvenes que los hombres de la misma edad, una brecha que solo se ha ampliado en los últimos años, lo que puede explicar algunas de las tendencias en el sentimiento juvenil: las mujeres generalmente viven más y se sienten más saludables que los hombres, pero también están sujetas a una mayor presión social solo por envejecer. Wettstein consideró que, “existe este doble estándar de envejecimiento. Los estereotipos de edad sobre las mujeres son de alguna manera más negativos que sobre los hombres. Las mujeres mayores están incluso menos representadas en los medios que los hombres y también tienen una representación más negativa”. La investigación también encontró una brecha educativa, aunque es más pequeña. Las personas con más educación tenían edades subjetivas más jóvenes que aquellas con niveles de educación más bajos, pero esta brecha se está reduciendo. Sin embargo, Wettstein, indicó que debemos tener cuidado al proyectar tendencias en el futuro. Es posible que la esperanza de vida no continúe aumentando (en los Estados Unidos está disminuyendo) y tampoco la discriminación por edad en la sociedad. Nuestra edad subjetiva no es solo un marcador del envejecimiento, sino también un estado mental, y el estado de ánimo parece influir en la edad subjetiva de las personas, al menos a corto plazo. Un estudio encontró que, si haces que los adultos se sientan tristes al darles lecturas o música tristes, se sienten mayores después. Lo contrario también podría ser cierto. Otro estudio encontró que los adultos mayores que recibieron comentarios positivos en una prueba de memoria y les dijeron que se desempeñaron bien en comparación con otros de su edad, tendieron a sentirse más jóvenes después. La actividad física y la reducción del estrés también tienen un efecto positivo a largo plazo sobre la edad subjetiva, dijo Wettstein. Y concluyó: “Pero en realidad vemos que los adultos mayores no tienen un bienestar más bajo que los adultos más jóvenes. Esto es resiliencia ”.
El estrés se define como una sensación de tensión mental y preocupación desencadenada, en general, por circunstancias adversas. Este estado, que es inherente a la condición humana, actúa como respuesta instintiva y natural frente a diversos estímulos desafiantes. La manera en que los individuos lo gestionan determina su impacto en la salud y el bienestar, tal como indica la Organización Mundial de la Salud (OMS). Si bien en general el estrés ha sido asociado a los adultos y a la vorágine de su vida cotidiana, ahora, la ciencia puso el foco en los jóvenes, ya que un estudio liderado por expertos de la Universidad Estatal de Carolina del Norte planteó que pueden experimentar “sensaciones de envejecimiento” en días estresantes, especialmente cuando sienten que tienen menos control sobre sus vidas Esta investigación liderada por Shevaun Neupert, profesor de psicología en la Universidad Estatal de Carolina del Norte, arrojó luz sobre cómo personas de entre 18 y 36 años pueden sentir los efectos del estrés en su percepción de la edad y en su bienestar físico y mental. El trabajo, titulado “El efecto de las creencias de control sobre la relación entre los factores estresantes diarios y la edad subjetiva en adultos más jóvenes”, fue publicado en la revista Mental Health Science. “La literatura nos dice que, cuando las personas mayores se sienten mayores de lo que realmente son, eso se asocia con una serie de resultados de salud negativos. Sin embargo, hay poca investigación que examine este problema en adultos más jóvenes: personas en la adolescencia y entre 20 y 30 años de edad. Una comprensión más profunda de este fenómeno en todos los grupos de edad podría ayudarnos a desarrollar intervenciones que protejan nuestro bienestar físico y mental”, dijo Neupert en un comunicado. Y agregó: “Este trabajo puede ser particularmente oportuno, ya que los investigadores del estrés están viendo un aumento en la cantidad de estrés que los adultos más jóvenes experimentan ahora en comparación con la cantidad de estrés que experimentaron las generaciones anteriores cuando eran jóvenes”. Para llegar a estas conclusiones, los expertos recolectaron datos de 107 adultos jóvenes, con edades comprendidas entre los 18 y 36 años, a través de encuestas diarias que se realizaron durante ocho días consecutivos. Estas encuestas buscaban capturar el nivel de estrés, la percepción de control sobre la vida y la edad subjetiva de los participantes. “Los participantes informaron haber experimentado niveles más altos de estrés de lo normal, también informaron verse y sentirse mayores. No obstante, esto sólo fue cierto en los días en que también consignaron sentir que tenían menos control sobre sus vidas del que normalmente tenían”, desarrolló Neupert. “Esto nos dice que el fenómeno del estrés que hace que las personas se sientan mayores no se limita a los adultos mayores. también les sucede a los jóvenes. Hay investigaciones que nos dicen que el estrés hace que los adultos mayores sientan su edad, o incluso se sientan mayores de lo que realmente son. También vale la pena señalar que tanto los niveles de estrés como los niveles de control eran relativos”, apuntó el autor. Al tiempo que concluyó: “Es importante porque sabemos que experimentar estrés crónico con el tiempo puede tener efectos adversos y que las personas generalmente informan niveles crecientes de estrés a medida que pasan de la edad adulta joven a la mediana edad, entre los 40 y los 50 años. Si estos jóvenes ya están experimentando niveles históricamente altos de estrés para su edad, y ese estrés está afectando su edad, será importante que prestemos mucha atención a los marcadores que utilizamos para evaluar el estrés físico y mental relacionado con la salud para esta generación”.
Comenzaron las postulaciones para la novena versión del programa de Participación Social SOMOS, presentado por Fundación Minera Escondida (FME), iniciativa que promueve el desarrollo de habilidades y competencias en jóvenes con el objetivo que puedan impulsar proyectos sociales y así impactar positivamente en el territorio. Este año, el llamado es a jóvenes de la región de Antofagasta entre 20 y 32 años, que lideren o formen parte de iniciativas comunitarias a través de agrupaciones, colectivos u organizaciones sociales. El plazo de postulación se extenderá hasta el domingo 19 de mayo a través de www.fme.cl, mientras que el 26 de junio se publicarán los resultados en el mismo sitio. “Queremos ver a jóvenes empoderados trabajando juntos para idear y ejecutar iniciativas transformadoras. Este proceso formativo les permitirá movilizarse, conectarse con otros líderes sociales y actores del ecosistema, generar alianzas y fortalecer su trabajo con la convicción de construir una mejor región de la mano de las nuevas generaciones”, señaló María Alejandra Cifuentes, Líder de Programas de FME. Comunidad de Agentes de Cambio A la fecha, más de 500 jóvenes líderes de la Región de Antofagasta han participado de este programa formativo, donde han desarrollado habilidades comunicacionales, de trabajo en equipo, reflexión crítica y otras herramientas que les ha permitido fortalecer su liderazgo. “Dentro de todo lo que nos enseñó el Somos está el desarrollo del pensamiento creativo, que es una de las partes que más me impactó, porque hay momentos en los proyectos en que uno se frena, y gracias a las herramientas que nos entregó el programa pudimos salir del estancamiento y comenzar a generar nuevos proyectos”, aseguró Lucas Vega, egresado Somos 2023. Así mismo, Paola Flores, quien participó del programa en 2022, destacó la importancia de robustecer las habilidades de los y las jóvenes líderes, “nos ayuda a canalizar nuestras motivaciones para que las podamos desarrollar de manera integral. En el plan formativo se ve todo lo que pueda servir para ejecutar un proyecto y también cómo conectar con el ecosistema social, sin duda este programa expande tus campos de posibilidades”. Para más información relacionada a la convocatoria pueden revisar las rede sociales de FME: @fundacionmineraescondida (Instagram) y Fundación Minera Escondida (Facebook).
El término woke (estar ‘despierto/a’ en inglés) ha ganado popularidad en los últimos años, especialmente en las redes sociales y la cultura pop. Originalmente utilizado para describir a alguien que está consciente de las injusticias sociales y raciales, el concepto de estar woke ha evolucionado para abarcar una mayor conciencia sobre una variedad de temas, incluyendo el feminismo, la igualdad de género, los derechos LGBTQ+, entre otros. A su vez, ha sido herramienta de marketing para grandes compañías y una forma de desacreditar de la derecha conservadora a los valores progresistas. El primer antecedente popular del término woke como llamamiento a las personas africanas y afrodescendientes fue del predicador, periodista y empresario jamaicano Marcus Garvey en 1923: “Wake up, Ethiopia! Wake up, Africa!” (‘¡Despierta, Etiopía! Despierta, África!’). Con esas palabras, el fundador de la Asociación Universal para la Mejora del Hombre Negro buscaba despertar la conciencia social y política entre las personas negras del mundo. Ya en 1938, el cantante afroamericano Lead Belly advertía “stay woke” (‘estad despiertos’) en el epílogo hablado de su canción protesta Scottsboro Boys. Esta canción narra la historia de los nueve adolescentes afroamericanos acusados injustamente de violar a dos mujeres blancas en Scottsboro, Arkansas, en 1931. En la actualidad, ser woke implica estar informado y comprometido con cuestiones relevantes a nivel social y político. Las personas que se identifican como woke suelen estar activamente involucradas en movimientos sociales, defensa de los derechos humanos y promoción del cambio positivo en la sociedad. Aunque el término puede generar controversia y críticas por su uso excesivo o superficialidad en algunas ocasiones, no se puede negar que ha generado un mayor interés por parte de las generaciones más jóvenes en temas importantes que afectan a nuestra sociedad. Es importante recordar que ser verdaderamentewoke va más allá de simplemente adoptar modas o tendencias; implica educarse constantemente, escuchar a diferentes perspectivas y tomar acciones concretas para contribuir a un mundo más justo e inclusivo.
¿Qué es la felicidad? ¿Existe un secreto para obtenerla? Esas son preguntas que han ocupado a filósofos e investigadores de los más amplios rubros durante cientos de años. Tan importante es, que se la considera una meta humana fundamental y tiene su propia efeméride: el Día Internacional de la Felicidad.Cuándo se celebra el Día Internacional de la FelicidadLa efeméride tiene lugar el 20 de marzo de cada año. Fue promulgada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2012 para “reconocer la relevancia de la felicidad y el bienestar como aspiraciones universales de los seres humanos y la importancia de su inclusión en las políticas de gobierno”. Cuáles son los 10 países más felices del mundo. Cada año se publica el Informe mundial de la Felicidad coincidiendo con la celebración del Día Internacional. Conforme a ese listado, que es resultado de evaluaciones de vida autoevaluadas promediadas durante los años 2021-2023, los 10 países más felices del mundo son los siguientes: 1. Finlandia. 2. Dinamarca. 3. Islandia. 4. Suecia. 5. Israel. 6. Países Bajos. 7. Noruega. 8. Luxemburgo. 9. Suiza. 10. Australia. Si se tiene en cuenta el ranking de las 25 naciones más felices del mundo, dos países latinoamericanos figuran en el listado: Costa Rica (que se localiza en el 12° puesto) y México (en el lugar 25°). ¿Cuál es el país más infeliz del mundo? Cabe destacar que Finlandia encabeza la lista general por séptimo año consecutivo. Mientras que Afganistán sigue ocupando el último puesto de la clasificación como la naciónmás infeliz del mundo.Por otro lado, Letonia (46º) y Congo (89º), con aumentos de 44 y 40 posiciones respectivamente entre 2013 y 2024, fueron las naciones con mayores incrementos en las evaluaciones de vida registradas en la encuesta. Cuáles son los países más felices para cada edad. Otro dato a destacar es que en esta ocasión el informe ofrece clasificaciones separadas por grupos de edad. En ese sentido, Lituania encabeza la lista para los niños y jóvenes menores de 30 años, mientras que Dinamarca es la nación más feliz del mundo para los mayores de 60 años. “Al comparar generaciones, los nacidos antes de 1965 son, de media, más felices que los nacidos a partir de 1980. Entre los Millennials (personas nacidas entre 1981 y 1996, según la Enciclopedia Britannica), la valoración de la propia vida desciende con cada año de edad, mientras que entre los Boomers (personas nacidas entre 1946 y 1964, aproximadamente) la satisfacción vital aumenta con la edad”, describe el reporte. En cuanto a los jóvenes de 15 a 24 años, los hallazgos muestran que su bienestar ha disminuido en América del Norte, Europa Occidental, Oriente Medio, Norte de África y Asia Meridional desde 2019, pero en el resto del mundo ha aumentado. No obstante, reconoce el informe, hay una “notable escasez global de datos de bienestar disponibles para niños menores de 15 años”. Un informe para saber cuáles son los países más felices del mundo. El Informe mundial de la Felicidad ofrece un panorama de la situación en el mundo y “refleja la demanda mundial de que se preste más atención a la felicidad y el bienestar como criterios para la política gubernamental”, según indica el sitio web del reporte. En el escrito se incluye una clasificación de la felicidad en diferentes países. Esa categorización, explica el sitio web del informe, se realiza a partir de la evaluación de las personas sobre sus vidas, que se mide utilizando la Escalera Cantril, en la cual los encuestados califican sus vidas actuales en una escala de 0 a 10, donde la mejor vida posible es el 10 y la peor vida posible es un 0. Esas clasificaciones provienen de muestras representativas a nivel nacional durante tres años.El documento es resultado del trabajo colaborativo entre Gallup, el Centro de Investigación sobre el Bienestar de la Universidad de Oxford, la Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas y el Consejo Editorial del Informe.
Los adultos de mediana edad y mayores tienden a sentirse más jóvenes que su edad cronológica, según muestran las investigaciones. Y esto puede ser algo bueno. Una investigación ha encontrado consistentemente que sentirse más joven generalmente se asocia con una mejor salud. Markus Wettstein, psicólogo de la Universidad Humboldt de Berlín señaló, “sabemos que aquellos que se sienten más jóvenes son más saludables” y agregó: “también se mantienen más saludables con el tiempo”. Los adultos mayores que se sienten jóvenes de corazón no solo pueden vivir más tiempo, sino que también pueden tener una mayor satisfacción con la vida, un menor riesgo de demencia, menos síntomas de depresión y una mejor salud en el futuro. Una nueva investigación sugiere que los adultos de mediana edad y mayores de hoy pueden sentirse más jóvenes que sus antepasados. Un estudio publicado en Psychological Science informó que, con el tiempo, los adultos se han sentido más jóvenes y más jóvenes que aquellos de la misma edad cronológica en el pasado, incluso teniendo en cuenta otros factores que podrían influir en la edad subjetiva, como enfermedades crónicas, soledad. y nivel educativo. La investigación también encontró una brecha de género pronunciada. Las mujeres informaron sentirse más jóvenes que los hombres de la misma edad, una brecha que solo se ha ampliado en los últimos años, lo que puede explicar algunas de las tendencias en el sentimiento juvenil: las mujeres generalmente viven más y se sienten más saludables que los hombres, pero también están sujetas a una mayor presión social solo por envejecer. Wettstein consideró que, “existe este doble estándar de envejecimiento. Los estereotipos de edad sobre las mujeres son de alguna manera más negativos que sobre los hombres. Las mujeres mayores están incluso menos representadas en los medios que los hombres y también tienen una representación más negativa”. La investigación también encontró una brecha educativa, aunque es más pequeña. Las personas con más educación tenían edades subjetivas más jóvenes que aquellas con niveles de educación más bajos, pero esta brecha se está reduciendo. Sin embargo, Wettstein, indicó que debemos tener cuidado al proyectar tendencias en el futuro. Es posible que la esperanza de vida no continúe aumentando (en los Estados Unidos está disminuyendo) y tampoco la discriminación por edad en la sociedad. Nuestra edad subjetiva no es solo un marcador del envejecimiento, sino también un estado mental, y el estado de ánimo parece influir en la edad subjetiva de las personas, al menos a corto plazo. Un estudio encontró que, si haces que los adultos se sientan tristes al darles lecturas o música tristes, se sienten mayores después. Lo contrario también podría ser cierto. Otro estudio encontró que los adultos mayores que recibieron comentarios positivos en una prueba de memoria y les dijeron que se desempeñaron bien en comparación con otros de su edad, tendieron a sentirse más jóvenes después. La actividad física y la reducción del estrés también tienen un efecto positivo a largo plazo sobre la edad subjetiva, dijo Wettstein. Y concluyó: “Pero en realidad vemos que los adultos mayores no tienen un bienestar más bajo que los adultos más jóvenes. Esto es resiliencia ”.
El estrés se define como una sensación de tensión mental y preocupación desencadenada, en general, por circunstancias adversas. Este estado, que es inherente a la condición humana, actúa como respuesta instintiva y natural frente a diversos estímulos desafiantes. La manera en que los individuos lo gestionan determina su impacto en la salud y el bienestar, tal como indica la Organización Mundial de la Salud (OMS). Si bien en general el estrés ha sido asociado a los adultos y a la vorágine de su vida cotidiana, ahora, la ciencia puso el foco en los jóvenes, ya que un estudio liderado por expertos de la Universidad Estatal de Carolina del Norte planteó que pueden experimentar “sensaciones de envejecimiento” en días estresantes, especialmente cuando sienten que tienen menos control sobre sus vidas Esta investigación liderada por Shevaun Neupert, profesor de psicología en la Universidad Estatal de Carolina del Norte, arrojó luz sobre cómo personas de entre 18 y 36 años pueden sentir los efectos del estrés en su percepción de la edad y en su bienestar físico y mental. El trabajo, titulado “El efecto de las creencias de control sobre la relación entre los factores estresantes diarios y la edad subjetiva en adultos más jóvenes”, fue publicado en la revista Mental Health Science. “La literatura nos dice que, cuando las personas mayores se sienten mayores de lo que realmente son, eso se asocia con una serie de resultados de salud negativos. Sin embargo, hay poca investigación que examine este problema en adultos más jóvenes: personas en la adolescencia y entre 20 y 30 años de edad. Una comprensión más profunda de este fenómeno en todos los grupos de edad podría ayudarnos a desarrollar intervenciones que protejan nuestro bienestar físico y mental”, dijo Neupert en un comunicado. Y agregó: “Este trabajo puede ser particularmente oportuno, ya que los investigadores del estrés están viendo un aumento en la cantidad de estrés que los adultos más jóvenes experimentan ahora en comparación con la cantidad de estrés que experimentaron las generaciones anteriores cuando eran jóvenes”. Para llegar a estas conclusiones, los expertos recolectaron datos de 107 adultos jóvenes, con edades comprendidas entre los 18 y 36 años, a través de encuestas diarias que se realizaron durante ocho días consecutivos. Estas encuestas buscaban capturar el nivel de estrés, la percepción de control sobre la vida y la edad subjetiva de los participantes. “Los participantes informaron haber experimentado niveles más altos de estrés de lo normal, también informaron verse y sentirse mayores. No obstante, esto sólo fue cierto en los días en que también consignaron sentir que tenían menos control sobre sus vidas del que normalmente tenían”, desarrolló Neupert. “Esto nos dice que el fenómeno del estrés que hace que las personas se sientan mayores no se limita a los adultos mayores. también les sucede a los jóvenes. Hay investigaciones que nos dicen que el estrés hace que los adultos mayores sientan su edad, o incluso se sientan mayores de lo que realmente son. También vale la pena señalar que tanto los niveles de estrés como los niveles de control eran relativos”, apuntó el autor. Al tiempo que concluyó: “Es importante porque sabemos que experimentar estrés crónico con el tiempo puede tener efectos adversos y que las personas generalmente informan niveles crecientes de estrés a medida que pasan de la edad adulta joven a la mediana edad, entre los 40 y los 50 años. Si estos jóvenes ya están experimentando niveles históricamente altos de estrés para su edad, y ese estrés está afectando su edad, será importante que prestemos mucha atención a los marcadores que utilizamos para evaluar el estrés físico y mental relacionado con la salud para esta generación”.